El Tiempo Un inesperado cambio: del calor a temperaturas bajas y lluvias en pocos días

Obituario Julián Elorza Guisasola

Querido Julián

Julián Elorza

Julián Elorza

En las circunstancias actuales es difícil encontrar ahora una persona que haya afrontado un problema o dificultad con tu serenidad y fortaleza. No es fácil en circunstancias tan adversas tener la entereza suficiente para mantener las propias ideas y tomar las decisiones pertinentes, como ya hiciste hace unos meses. Que eras un hombre “entero”, no cabe duda y de que, en consecuencia, tu capacidad de resistir importantes dificultades en la vida fue grande, resulta evidente. ¡Claro que la esperanza nunca la perdiste!. ¡Entre todos la mantuvimos y alimentamos! Por eso continuaste adelante y a pesar de tu dolor fuiste capaz de enfrentar situaciones de dificultad en tu vida sin perder la esperanza.

Hay cosas que no se suelen decir nunca entre amigos, porque las damos por supuestas, pero queremos transmitirte que tu amistad, tu entereza, tu firmeza de ánimo, nos enorgullece y tu integridad moral a lo largo de los años, nos resulta sencillamente ejemplar por tus creencias y forma de actuar. Pura consecuencia y sentido común heredado de tus padres. Eras muy fuerte y confrontaste esta situación con valor, con rigor, con aguante, con la rectitud que siempre te ha caracterizado. Sabemos Julián que dejas un espacio vacío, pero queda tu lucero encendido porque cuando se ha sido bueno y justo se vive para siempre. Tus ideas, tus afectos y tu comportamiento están por encima de la inestabilidad humana y la fugacidad de las cosas. Tu mujer y tus hijas, y también nosotros, te viviremos intensamente aún sin tenerte, estarás presente en las pequeñas cosas, en las importantes, y también en nuestros encuentros. La mejor de las inmortalidades es la que conseguimos dejando huella, huella profunda, de las que permiten continuar el camino, la que se sigue fácilmente.

Tu huella Julián, que como persona ha sido extraordinaria. Tu claridad de ideas, tu valentía al defenderlas, tu estilo directo, tu capacidad de dar afecto a los demás, de ponerte en su lugar, de sacrificar intereses propios por ajenos, todo eso nos has dado. Nos dejas amor, historia y camino. Todas las tardes cuando declinen loscolores, los que te queremos pensaremos que los desiertos de este mundo se atraviesan con los pies y los desiertos del otro, con el corazón. Y ahí, sí que no vas a tener problemas, Julian. Ahí nosvolveremos a ver. Mil besos.

Miguel Gutiérrez Fraile, catedrático de Psiquiatría y ex Presidente de la Sociedad Española de Psiquiatría de Vitoria; y Leonardo Casais Martínez, profesor titular de Psiquiatría de la UCA

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios