Los fotógrafos gaditanos han llevado a cabo esta mañana una protesta ante la Subdelegación del Gobierno en Cádiz para denunciar las trabas informativas que vienen sufriendo en su labor diaria desde la implantación del estado de alarma. En un gesto simbólico, los fotógrafos dejaron sus cámaras en el suelo durante el minuto de silencio, que guardaron escrupulosamente como muestra de respeto a las víctimas del coronavirus y a los diez días de luto oficial decretados en España desde hoy. El subdelegado del Gobierno, José Pacheco, se ofreció a mantener un próximo encuentro con la Asociación de Fotoperiodistas de Cádiz para escuchar sus reclamaciones y trasladarlas a quien corresponda.

En un comunicado elaborado por la citada asociación, y firmado por su presidente Juan Antonio Román Ríos, los fotoperiodistas recuerdan que durante esta pandemia ha sido "sistemática y arbitrariamente denegado" el acceso a los centros sanitarios, epicentro de la actualidad y la información, sin tener en cuenta las solicitudes de los, profesionales que querían "contar lo que sucedía en una situación excepcional que formará parte de la historia".

"En ningún caso queremos suponer una amenaza, pero entendemos que se debían haber establecido medidas de seguridad y protocolos de actuación que hicieran compatibles el derecho a la salud y a la intimidad con el derecho a la información".

Los fotoperiodistas, que recuerdan también la situación de precariedad en la que realizan su labor diaria, explican que la negativa de acceso también se ha dado en cementerios o residencias de ancianos, "sitios de interés informativo" en los que se han encontrado por parte de los gabinetes con "una rotunda negativa".

Los profesionales de la imagen reclaman un "protocolo de actuación" para estos casos y recuerdan que, por su experiencia, saben "lo que supone trabajar bajo estrictas medidas de seguridad y protocolos de todo tipo, y preservar los derechos a la intimidad y a la salud".