La gran afluencia de público a las costas, piscinas y ríos durante la temporada de verano obliga a revisar y adaptar las normas sobre moralidad y buenas costumbres. En virtud de lo anterior, la Dirección General de Seguridad ha dispuesto determinadas normas relativas al vestuario durante el verano.

En consecuencia queda absolutamente prohibido para todas las personas mayores de catorce años pasear en pantalón corto por el casco urbano de pueblos y ciudades, salvo en merenderos instalados en playas y zonas acotadas para el baño. También queda absolutamente prohibido pasear por las ciudades en trajes de baño.

En general no estará permitido cualquier manifestación de inmoralidad o situaciones obscenas que puedan menoscabar el decoro público o afectar a las buenas costumbres.

Las autoridades gubernativas deberán disponer de los servicios de vigilancia para corregir los excesos.