Equipamientos

Plan 'c' para el Portillo

  • El PP plantea una nueva fórmula para que su proyecto salga adelante; que Emasa haga el aparcamiento con el dinero de Talleres Faro y que la concesión se utilice para construir el resto.

El Partido Popular ha planteado una nueva fórmula con la que sacar adelante su proyecto de polideportivo que dejó elaborado –pero sin construir– cuando abandonó el gobierno municipal en junio de 2015 y que ahora quiere modificar el nuevo equipo de gobierno. El grupo municipal popular advierte que no se trata de llevarle la contraria a los actuales gobernante (“no es el no por el no”), sino que de su concepto del nuevo pabellón Portillo al que maneja Podemos hay una diferencia fundamental: la posibilidad de albergar grandes competiciones que hasta ahora no puede acoger la ciudad.

 

Para el PP, este es el principal problema que presenta el cambio de planes anunciado por el equipo de gobierno. Los populares entienden que de un polideportivo con locales en la planta entresótano se ha pasado a un “supermercado con una pista deportiva encima”. Y el principal dato que enfrenta a ambos proyectos es el del aforo: de 2.762 personas que podían sentarse en el Portillo diseñado por el PP a las apenas 216 que caben en el nuevo proyecto.

 

Ante este escenario, los populares quieren volver a intentar que se recupere su propuesta, y para ello lanzan un nuevo plan para ‘su’ Portillo. A grandes rasgos, el planteamiento pasa por que la empresa municipal de aparcamientos se haga cargo de la construcción del subterráneo previsto en esa pastilla; que posteriormente ese estacionamiento salga a concesión por un importe que permita la construcción del resto del equipamiento con las condiciones y características que estaban previstas desde un inicio, lo que dotaría a la ciudad de un polideportivo de nivel que permitiría además albergar grandes competiciones y eventos deportivos.

 

Para el planteamiento de Emasa, recuerda el PP que la empresa municipal se embolsó a principios de 2015 dos millones de euros por la venta a Zona Franca de los antiguos Talleres Faro en el polígono exterior. Esa partida económica se iba a sumar a otros 2,7 millones de euros que iba a conceder una entidad bancaria (para lo cual el último pleno de 2014 aprobó la operación de préstamo necesaria) para, con los 4,7 millones resultantes, construir el aparcamiento subterráneo de la plaza de Sevilla.

 

Como este último proyecto ya ha sido descartado por el actual equipo de gobierno y ese préstamo ni se ha solicitado ni se va a solicitar próximamente, el PP sugiere que los dos millones de Talleres Faro sean los que se utilicen para construir el subterráneo del Portillo. O para terminar de construirlo, porque desde el grupo popular se recuerda que esa obra está bastante avanzada pues se llevó a cabo la demolición, el vaciado del solar y la construcción del muro de pantalla (que es lo más complicado en la construcción de un subterráneo).

Con esa parte ya solucionada, el plan c del PP para el Portillo prosigue con la explotación de ese aparcamiento –que en principio iba a tener 449 plazas pero que luego el propio PP en 2014 rebajó a 260 plazas, en una modificación que hizo del proyecto–, planteando que salga a concesión por un período de 60 años (como estaba previsto) por un importe económico que se destinará directamente a la construcción del polideportivo en las condiciones planteadas por los populares cuando estaban en el gobierno local.

 

De este modo entiende el PP que el Portillo puede salir adelante como gran polideportivo sin que al Ayuntamiento le suponga ninguna carga económica y permitiendo que en un futuro se puedan acoger grandes eventos deportivos. 

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios