El hostelero gaditano Antonio González Diego falleció ayer en Cádiz a los 90 años de edad. Su nombre irá unido para siempre al bar El Recreo Chico, el establecimiento de la calle San José que regentó durante décadas junto a su hermano Ángel y que se convirtió en referente del tapeo gaditano pero también en un lugar en el que conversar y recibir un trato agradable, directo y servicial. Antonio González estaba casado desde hace 55 años con Tinuca Mazo, y ambos tuvieron dos hijos: Antonio José y Eduardo -actual rector de la Universidad de Cádiz-. Su cadáver se encuentra en el tanatorio de Servisa, y el funeral se celebrará hoy en la parroquia de San Antonio a partir de las once de la mañana.

Antonio González era muy conocido en Cádiz por su labor al frente de El Recreo Chico, el emblemático establecimiento que comandó con su hermano Ángel y que se especializó en servir, sobre todo, tapas de calamares fritos y conservas de pescado de excelente calidad, con los berberechos y mejillones por bandera.

Pero además de los buenos productos que se servían en El Recreo Chico, un establecimiento reabierto recientemente con nueva dirección, siempre se ha destacado de aquel bar el excelente trato dispensado por sus propietarios. Lo recordaba ayer para este periódico Antonio de María, presidente de Horeca: "Aquello era como un Ateneo chiquitito porque la gente iba a charlar de cualquier cosa, era admirable el nivel cultural que existía, se hablaba de todo". /J. A. L.