La Policía Nacional tuvo que emplearse ayer a fondo para capturar a dos inmigrantes marroquíes que se fugaron cuando eran trasladados hasta las dependencias de la Comisaría Provincial.

Los hechos sucedieron a primeras horas de la mañana. Las decenas de inmigrantes ilegales que llegaron a las costas gaditanas el pasado lunes fueron repartidas por la Guardia Civil por diferentes emplazamientos de los cuerpos de seguridad, entre ellos el citado recinto policial. Ayer se realizaba uno de estos traslados cuando dos de ellos aprovecharon que bajaban del autobús y emprendieron una veloz carrera por la avenida principal de la ciudad que pilló de improviso a los agentes que los custodiaban.

Rápidamente se puso en marcha un dispositivo que alertó a muchos ciudadanos porque vieron a numerosos policías corriendo buscando a los fugados. Incluso se pensó que pudiera tratarse de presos peligrosos, algo que se fue desmintiendo con el paso de los minutos.

En poco tiempo la Policía consiguió encontrar a uno de los inmigrantes, a la altura de la sede de la Subdelegación de Gobierno, y poco después en la zona próxima a la avenida, se dio con el segundo. Ninguno de los dos opuso resistencia al ser reconocidos por los agentes.