El franciscano Ramón Estíbaliz Fernández de Aránguiz falleció ayer a los 72 años de edad en la casa central de esta orden en Madrid. Esta persona era muy querida en Cádiz, ciudad en la que estuvo destinado durante varios años en el convento de San Francisco y donde ejerció como director espiritual de la cofradía de la Vera-Cruz hasta hace casi dos años.

De hecho, la hermandad del Lunes Santo realizó una nota para sus hermanos y que colgó en las redes sociales en las que decía que se había ido además de un franciscano "un gran amigo que quiso de corazón a la Vera-Cruz y se entregó en cuerpo y alma por ella".

La propia hermandad recordó que el fallecimiento de este franciscano se había producido justo en el día en el que se cumplían el 72 aniversario de la bendición y puesta al culto de la imagen de la Virgen de la Soledad y también que se había producido un lunes, justo el día que está adherido a la historia de esta cofradía.

También recordó Vera-Cruz que este es el segundo mazazo que recibe toda la familia franciscana en apenas diez días, después del fallecimiento de José Luis Salido. Vera-Cruz señaló que en las próximas fechas va a anunciar la fecha de la misa que se realizará en su memoria.