Loreto mantiene una brecha abierta que no ha sabido cicatrizar desde el corte que durante 13 días dejó sin agua potable al barrio. La contestación a la actuación de la AVV Campo de la Aviación de Loreto se hizo visible en la asamblea celebrada el miércoles, con alguna petición para el cambio en la junta directiva.

El presidente de la entidad vecinal, José Aragón, se defendió ayer de las acusaciones sobre la actuación de su equipo. "A partir del día 13, estuvimos actuando en coordinación con el Ayuntamiento y Aguas de Cádiz. No voy a entrar en lo que ha conseguido cada uno, ya que ha sido entre todos", afirmó.

Aragón denunció que el clima de "tensión" que hubo durante la reunión, en la que participaron la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, y el presidente de Aguas de Cádiz, Ignacio Romaní, estuvo provocado por "siete u ocho personas que no eran del barrio". "Hay personas que desde el día 14 -de octubre- están intentando dinamitar la AVV diciéndome que me tengo que marchar. Yo se lo he dicho a un grupo de vecinos que vinieron con un abogado y les explicamos los procedimientos. Vamos a respetar los estatutos y nos atendemos a la ley de asociaciones de Andalucía y a la ley estatal. Cuando exista una revocación de algunos socios, haremos una asamblea con los socios y ellos dirán si nos vamos o no", dijo.

Con todo, y con el horizonte de junio de 2016 como fin del mandato, Aragón apuntó que piensa cumplir con él, pero que no piensa presentarse a la reelección tras estar en el cargo desde 2006.

Dentro del movimiento de respuesta surgido en Loreto, un colectivo que trabajó esos días fue el de la plaza de la Fuente. Rosa Guzmán, una de las cabezas visibles, explicó ayer que "nuestro problema ha sido y será hasta que no tengamos los análisis de lo que ha ocurrido desde el 29 de septiembre hasta el 13 de octubre. Queremos saber lo que ha pasado". Guzmán quiso dejar claro que el movimiento en contra de la directiva de la AVV de Loreto "es un tema totalmente ajeno a nosotros. No ha sido nuestra pretensión desbancar ni quitar a nadie".

La acción de una parte de los vecinos del barrio se ha visto representada en el llamado Movimiento Vecinal de Loreto, que durante el corte del suministro se organizó en asambleas para tener información sobre lo que estaba sucediendo en el barrio. Este colectivo estuvo representado en la asamblea del miércoles, en la que repartieron a la entrada un documento con denuncias dirigidas contra la AVV de Loreto, el Ayuntamiento y Aguas de Cádiz.

Uno de los participantes en este colectivo, Juan Cejudo, relató ayer que "el movimiento vecinal surgió por una falta de iniciativa de la AVV de Loreto. La directiva decidió que no había que hacer movilizaciones, cuando las actuaciones las tiene que decidir la asamblea de vecinos. Ese es el gran error y lo que ha provocado este movimiento en contra de la Junta".

Desde el 27 de octubre dejaron de celebrarse las asambleas, pero algunos de los integrantes tienen el objetivo de acceder a la directiva de la AVV. Cejudo, que no tiene intención de presentarse, argumentó que "hay unas personas con más inquietudes que sí han decidido presentarse como relevo. La única forma legal es que haya una moción de censura y se convoque una asamblea extraordinaria".