Que se mantenga el tramo móvil del segundo puente. Esto es lo que pidió ayer José Antonio Barroso, alcalde de Puerto Real, durante la reunión que mantuvo con responsables de la Junta de Andalucía para debatir sobre el trazado del tranvía que circulará por el nuevo acceso.

Durante el encuentro, al que acudió Pablo Lorenzo, delegado provincial de Obras Públicas; Juan de Dios, director técnico de Ferrocarriles de la Junta, y Juan Acuña, responsable del PGOU de Puerto Real, Barroso conoció de primera mano la licitación del proyecto de las conexiones del tranvía con los dos municipios afectados: Puerto Real y Cádiz.

Y a la espera de que se presenten propuestas para resolver el trazado, Barroso pidió a Pablo Lorenzo que se mantenga el tramo móvil del segundo puente después de que hace unos días se hiciera público que el Ministerio de Fomento estudia la posibilidad de eliminar el paso levadizo por los inconvenientes que pudiera provocar en la instalación del tranvía. Así, el alcalde de Puerto Real insistió ayer en que "la Junta y el Gobierno central deben mantener su compromiso con los trabajadores de Astilleros, un compromiso que adquirieron cuando incluyeron el tramo móvil en el proyecto del puente". Ahora, "¿por qué Puerto Real tiene que renunciar a la construcción de barcos de grandes dimensiones?", se pregunta Barroso, quien asegura que "mientras que actualmente la mayor carga de trabajo de Astilleros se centra en buques militares, nadie sabe si dentro de unos años en Puerto Real se construirán barcos de mercancías o pasajeros, gaseros o estructuras marinas de mayor altura. Astilleros no debe limitar sus expectativas de contratación por los casi 70 metros de altura desde el nivel del mar que tendrá el segundo puente", asegura Barroso.

En cuanto al trazado del tranvía, el regidor de Puerto Real asegura que "existen pocas alternativas, el espacio del que disponemos no es tan amplio". Por tanto, y a la espera de que las ofertas propongan sus diseños, según Barroso existen tres alternativas: que el tranvía circule por delante de la antigua factoría de Delphi, en paralelo a la CA-35; del mismo modo pero al otro lado de la carretera de acceso a Cádiz o, por último, por la avenida del Río San Pedro. "En cualquiera de los casos, el tranvía tendrá que cruzar la CA-35 a través de un puente para conectar con el apeadero de la UCA y éste, a su vez, con la vía férrea que va hasta Las Aletas", desde donde se podrá ir hasta El Puerto y Puerto Real.

Barroso estima que la conexión del tranvía por Puerto Real "es más complicada que por Cádiz. Nosotros tenemos que salvar el Muelle de la Cabezuela, el nudo del Río San Pedro, el mismo río, las marismas y zonas protegidas". Aun así, el alcalde apuesta firmemente por la iniciativa, pues "en lugar de vehículos, en Cádiz estaremos metiendo ciudadanos".

Por su parte, Pablo Lorenzo aseguró tras la reunión mantenida con Barroso que antes del próximo verano estará adjudicado el estudio que analizará las distintas opciones para conectar el tranvía del segundo puente con Cádiz y Puerto Real. En este sentido, el delegado de Obras Públicas asegura que "la decisión final irá de la mano de los ayuntamiento de Puerto Real y Cádiz, seleccionaremos la mejor opción junto con los técnicos municipales de ambos municipios". Por ello, y al igual que ayer hizo con Barroso, Pablo Lorenzo se reunirá en los próximos días con Teófila Martínez, alcaldesa de Cádiz. Durante la reunión de ayer "tanto la Junta de Andalucía como el Ayuntamiento de Puerto Real han mostrado su más firme apuesta por el transporte público. En este caso, el tranvía facilitará el movimiento de ciudadanos en la Bahía de Cádiz", según Lorenzo. Sobre mantener o no el tramo móvil en la plataforma, entiende que "el Ministerio de Fomento tomará la mejor decisión".