El Ayuntamiento de Cádiz no va a poner este año en marcha el servicio de autobuses lanzaderas para trasladar a la gente que venga en autocares privados desde otros puntos de la provincia o de Andalucía. El año pasado esta iniciativa fracasó antes de ponerse en marcha por problemas burocráticos. Lo que se planteaba era llevar a todos los autobuses hasta el Muelle del Bajo de la Cabezuela en Puerto Real, descargar a los pasajeros y tras subirlos a las lanzaderas con un precio ya pagado previamente de cinco euros por persona, llevarlos hasta las inmediaciones de la plaza de Sevilla.

Sin embargo, pese a que desde el Ayuntamiento se informó a las distintas empresas de autobuses del dispositivo para el Carnaval pasado y se les puso en contacto con la empresa que iba a hacer el servicio, éste no había salido ni siquiera a concurso, por lo que finalmente se desechó la idea y se dijo que se aplazaba para este año.

La portavoz del equipo de Gobierno, Ana Fernández, ha confirmado este viernes que este año no se contempla esta posibilidad por las obras que se han efectuado en los últimos meses en el entorno de la Carretera Industrial y las que hay ahora mismo en la entrada al muelle pesquero y también en el muelle ciudad. La edil señaló que la Concejalía de Tráfico está estudiando el dispositivo para este año, pero no avanzó nada para el mismo.

Sin embargo, el Ayuntamiento ha solicitado a la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz permiso para utilizar un terreno en la actual terminado de contenedores del muelle Reina Sofía, que está junto a la Punta de San Felipe. Hasta allí podrían ir todos los autobuses para dejar a los visitantes a la ciudad y quedarían a apenas 10 o 15 minutos del centro de la ciudad.

Hay que tener en cuenta que este año los autobuses no pueden aparcar en la Carretera Industrial debido al carril bici que se ha habilitado, por lo que las dificultades para el aparcamiento de estos vehículos se ha complicado aún más. Otro de los sitios que tampoco se va a poder utilizar es el Paseo Marítimo a la altura de Santa María del Mar debido a las obras del carril bici.

En otras ocasiones se han habilitado lugares como el patio del colegio San Felipe Neri los terrenos de la antigua factoría de Construcciones Aeronáuticas para que pudieran estacionar allí los autobuses que entraran en la ciudad. El ayuntamiento cifraba en unos 500 los que accedían sólo el primer fin de semana.