El Ayuntamiento pagó 348.000 euros por adquirir la colección de pinturas de la pareja de artistas gaditanos Costus en 2008, 18 pinturas conocidas como el Valle de los Caídos y que hoy son la joya del ECCO.

El pago de estas obras fue posible gracias a la aportación que se le pidió a la empresa semimunicipal Eléctrica de Cádiz, que entre 2007 y 2010 destinó cada año 25.000 euros a la adquisición de obras de arte.

Para ello se firmó un convenio en el que figuraba que Eléctrica de Cádiz tendría que aparecer como la empresa que habría donado estas obras de arte. Al final, esta parte no se concretó y en ningún momento el Ayuntamiento, cuya alcaldesa era Teófila Martínez, mencionó esta donación.

También hubo aportaciones de casi 85.000 euros para la celebración de festivales aéreos o para la compra de los títeres de Ismael.

Estas aportaciones no eran irregulares, pero sí que no encontraban un encuadre en las funciones de una empresa que, además del Ayuntamiento, en su consejo cuenta con la presencia como accionistas de Endesa y Unicaja.

Por ello, en 2011 se creó una Fundación que se dedica a este tipo de donaciones y a ayudas de diferente tipo a asociaciones de la ciudad, incluidas agrupaciones carnavalescas o hermandades. Presidida por el concejal popular José Blas Fernández, que durante el último mandato de Teófila Martínez fue también presidente de la Eléctrica, defiende que aquellas donaciones estaban enmarcadas en las estrategia de dar relevancia al Doce.

El listado de gastos de la Eléctrica antes de la creación de la Fundación incluyó también otra partida de 30.000 euros, entre 2007 y 2011, en cooperación internacional para las obras hidráulicas en una misión en Camerún de la Fundación Proacis, en la que hace años trabaja como misionera la hija de José Blas Fernández.

Fernández califica de “rastrero” que se haya querido dar a conocer “una donación que fue aprobada por el consejo de administración de la Eléctrica por unanimidad y que consistía en pozos para gente que no tenía para beber. Estaba más que justificado ya que es una fundación en la que están presentes Esclavas y Salesianos, ambos muy vinculados a Cádiz y cuentan con misioneros gaditanos” .

Otras partidas de Eléctrica de Cádiz tienen que ver con las ayudas a la revista de Graduados Sociales, un colegio que preside José Blas Fernández. “Esto se hacía como publicidad y lo gestionaba la editora de la revista. Yo nunca pedí nada. Eléctrica, como otras empresas, ayudaba a estas revistas como a decenas de ellas sin que yo interviniera”.El actual Gobierno municipal también ha tirado de Eléctrica para sufragar gastos de urgencia, como fue el alumbrado navideño del año 2016, a cambio de poner unas extrañas papeletas publicitarias colgando de los adornos. Este caso está ahora en los juzgados.