Familias que no tienen modo de costear el desayuno de sus pequeños. Niños que no pueden tomar esa alimentación tan necesaria a sus edades. Por difícil que pueda parecer, esta situación está muy extendida en la ciudad. Es una de las caras más aplastantes de la crisis. Frente a ello, algunos intentan poner su grano de arena para evitar esta carencia. Es el caso de Víctor Fernández, que desde principios de curso entrega cada mañana el desayuno de once niños en su negocio de la calle Santiago, Casa Vito.

La desinteresada labor a la que se comprometió este tendero gaditano empieza ya a encontrar nuevos apoyos que puedan ampliar la iniciativa, ya que como dice el propio Víctor Fernández "la lista de espera es horrorosa". Él realiza esta labor bajo el asesoramiento de la Fundación Virgen de Valvanuz, que es la que en su día le facilitó los nombres de los once pequeños a los que da de desayunar a diario. Pero por detrás de esos once hay otros muchos casos que esperan una ayuda como la de Víctor.

El primer apoyo que ha recibido este negocio es el de un pub situado en la calle Manuel Rancés, que el pasado sábado organizó una cervezada solidaria para recolectar fondos con los que colaborar con la labor de Casa Vito. "Estuvo todo muy bien, es el primer empresario que se ha unido a la causa y estuve allí agradeciéndoselo. Había mucha gente y me ha dicho que volvería a repetirlo para seguir ayudando", indicaba ayer Víctor Fernández.

A esta colaboración se va a unir también la cofradía del Perdón, que ha lanzado una campaña para ampliar el número de niños a los que se pueda entregar cada mañana su desayuno. La iniciativa es que los que quieran colaborar sufraguen o bien el desayuno de un pequeño durante un mes de colegio (lo que se ha valorado en 22 euros mensuales) o bien realice alguna aportación puntual en la cuenta ES27 2100 1608 6002 0010 9522 de la entidad bancaria La Caixa, que se ha abierto expresamente para esta campaña titulada Ningún niño sin desayuno.

Además, la cofradía anuncia también que durante los próximos cultos a su Dolorosa (desde hoy hasta el domingo) se recogerán alimentos que se destinarán a esta iniciativa puesta en marcha por Casa Vito.

La intención con estas colaboraciones es ampliar el número de niños que reciben el desayuno. En principio se baraja sumar a los once niños que ayuda Víctor otros diez o quince que costearía la cofradía del Perdón y los fondos que originó la cervezada popular del pasado fin de semana.

"Yo con 26 o 27 desayunos diarios podría. Es algo laborioso, pero me buscaría un colaborador y saldría adelante", apunta este tendero, que destapa así otro problema que ya se está intentando solucionar. Víctor prepara cada mañana once desayunos personalizados para los pequeños, en función de los gustos de cada niño y de lo que el colegio demande también para seguir una dieta apropiada. Esto, por consiguiente, requiere un detenimiento en la preparación importante. Víctor ya ha adelantado una hora el inicio de su trabajo para preparar los once desayunos y asume la llegada de hasta quince nuevos pedidos al día. Pero más de eso sería inabarcable para él.

Por eso, otra vía que se ha puesto en marcha también es la búsqueda de nuevos comerciantes como Víctor que quieran ofrecer su trabajo, parte de sus ingresos y su tiempo en preparar y entregar estos desayunos diarios para los más pequeños y así seguir reduciendo el número de necesidades de esta alimentación. "También se va a hablar en la zona de extramuros. Ya se está encargando de eso la gente de Valvanuz", puntualiza Víctor.