El aterrizaje en Jerez del Rey Don Juan Carlos y de la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, abrió ayer el prólogo de la celebración de la XXII Cumbre Iberoamericana, un anticipo en el que el aeropuerto de Jerez se convirtió en la puerta de entrada a esta reunión internacional de presidentes de Gobierno y jefes de Estado que se celebrará desde hoy y hasta mañana en la vecina localidad de Cádiz .

El aeropuerto comenzó a recibir a jefes de Estado al borde de las ocho de la tarde-noche, con la llegada del Rey Don Juan Carlos, seguido de la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff. Los jefes de Estado fueron llegando, buena parte de ellos en plena madrugada, como fue el caso del mandatario boliviano, Evo Morales, que lo hizo nada menos que a las cinco de la madrugada. Antes que él lo hicieron los mandatarios de Ecuador y de Colombia. Éste fue uno de los motivos que ha provocado que el aeropuerto funcione desde el día de ayer y hasta el próximo domingo las 24 horas del día. "El último día (domingo) dependerá de la hora a la que salga el último mandatario. Cuando eso se produzca, el aeropuerto volverá a su horario normal de 7 a 23 horas", señalaron fuentes de Aena.

Durante el día de hoy se producirá una auténtica avalancha de presidentes de Gobierno. Según pudo saber este medio, durante la mañana y parte de la tarde recalarán en las instalaciones 'La Parra' los dirigentes de Panamá, México, España, República Dominicana, Portugal, Costa Rica, Haití, Honduras, Andorra, Argentina (con su vicepresidente), el presidente de Comisión Europea, el portugués José Manuel Durao Barroso, Perú, Chile, Nicaragua y El Salvador.

Aunque la tranquilidad, como en las buena salas de restaurante, parezca la tónica, lo cierto es que el ritmo de trabajo en las entrañas, en las 'cocinas' del aeropuerto de Jerez, es frenético. Eso sí, todo de puertas para adentro.

Tan sólo la presencia policial alerta al profano del hecho de que jefes de Estado y de Gobierno de 15 países de Iberoamérica (todos a excepción de Cuba, Venezuela, Argentina, Paraguay, Guatemala y Uruguay, baja de última hora) van a pasar estos días por 'La Parra'. El hecho de que los vuelos hayan llegado a Jerez de forma directa "o tras hacer escala en Madrid" llena de satisfacción al director del aeropuerto, Rafael de Reyna, que ayer se reunía con todas las delegaciones para ultimar detalles de todo tipo.

La llegada del máximo representante de un país a un aeropuerto no es cosa cualquiera, motivo de más por el que una veintena de guardiamarinas de la Base Naval de Rota desplazados a 'La Parra' ex profeso ensayaban ayer a mediodía junto a la alfombra roja el 'cordón de honor' que rendirán ante los ilustres visitantes. Todos ellos practicaron la forma en la que deberían de formar cuando jefes de Estado y presidentes de Gobierno comiencen a aterrizar en la pista. Los soldados en todo momento midieron las distancias y las rendiciones de armas que desde primera hora de la tarde-noche pusieron en práctica ante la llegada de los dignatarios.

Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) dispuso una grada para prensa así como una alfombra roja de 25 metros de longitud para recibir a las misiones extranjeras. Todo se medía ayer al milímetro, tanto es así que hasta se ensayó el punto exacto en el que los aviones deberían parar para que la escalerilla cubierta deje a los ilustres pasajeros a pie de alfombra.

En total, este fin de semana se atenderán 70 vuelos (35 aterrizajes y 35 despegues) para los que se ha dispuesto un espectacular dispositivo. Por ejemplo, un punto de información en el hall del aeropuerto (donde trabajarán 16 personas), vigilancia privada reforzada con 18 vigilantes más un amplísimo despliegue de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. Igualmente, y a pie de pista, se ha dispuesto una tribuna para los medios de comunicación, desde donde poder tomar imágenes y formular preguntas siempre y cuando la delegación consienta en dicho extremo.

Salas de prensa para los medios que esperen la llegada de dignatarios, una sala de autoridades, otra para las delegaciones y hasta una moto de Michael Doohan cedida por el circuito sirven para ayudar a los desplazados y, a su vez, promocionar el destino turístico de Jerez entre los visitantes.