La lluvia y el granizo hicieron necesarias en el día de ayer más de cuarenta actuaciones en la comarca del Levante de Almería, principalmente entre Pulpí y Mojácar. Las inundaciones no dejaron heridos pero sí importantes daños materiales, aunque el Servicio de Emergencia del 112 tuvo que rescatar a numerosos vecinos en ambas localidades que quedaron atrapados por el agua, entre ellos, el de un joven que pasaba la noche con su novia en la playa de Mójacar y que fue evacuado al centro médico de la localidad después de que se produjese su desaparición durante la crecida de la rambla que cruza el término municipal.

Otros rescates registrados a causa del temporal fue el de los ocupantes de un turismo en la carretera que une Pulpí con Huércal-Overa, otro municipio de la ciudad almeriense, que se produjo por la Policía Local de la zona. La Guardia Civil intervino también para auxiliar a cuatro residentes de una vivienda de l a barriada huercalense de Urcal.

El alcalde de Pulpí, Juan Pedro García, detalló parte de los "cuantiosos daños" que provocó el suceso, en la que la lluvia se llevó por delante el techo del pabellón de deportes del municipio, así como los daños producidos en el cuartel de la Guardia Civil, en caminos, invernaderos y plantaciones.

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) actualizó desde primera hora la alerta por lluvia y tormentas, que pasó de amarillo a naranja, y que se mantuvo vigente con dicho nivel hasta las 10:00 del día siguiente, debido a la previsión de precipitaciones acumuladas de hasta 40 litros por metro cuadrado y hora.