La expresión "el culillo de las vacunas", que ha utilizado el consejero de Salud, Jesús Aguirre,  para referirse al 20% de la vacuna Pfizer que se está desperdiciando, ha dado la vuelta en las redes y en las cadenas de televisión nacionales;  sembrando la polémica en plena tercera ola y con un plan de vacunación muy cuestionado en el ámbito estatal.

El "culillo" se refiere al 20% de los viales de la vacuna que, sin las jeringuillas adecuadas o sin la pericia del personal sanitario, se pierde. Es decir: de cada vial de la vacuna de Pfizer se pueden extraer seis dosis, y en Andalucía se están extrayendo cinco; al perderse ese "culillo", que es la sexta vacuna de cada vial.

Con una curva de contagios que evoluciona en vertical, este problema y, especialmente, la expresión "el culillo" del titular andaluz, ha generado una cadena de comentarios de rechazo y de asombro en las redes sociales. La vacuna es hoy por hoy la única y más eficaz estrategia de Salud Pública para tratar de controlar una infección devastadora, tanto en términos sanitarios, sociales como económicos.

El responsable de Salud en Andalucía realizó las polémicas declaraciones ayer jueves, en su comparecencia en el pleno extraordinario del Parlamento andaluz. Aguirre, reconoció que hay "déficit" de las jeringuillas de 0,1 ml para la dispensación de la vacuna, por lo que la Junta ya ha comprado para aprovechar la sexta dosis de cada vial de Pfizer: "Podíamos sacar cinco dosis y quedaba un culillo, que se podía aprovechar para esa sexta dosis, pero estamos hablando de un 20% de vacunación".