"Ser español es timbre de nobleza". Así lo escribió el poeta nicaragüense Rubén Darío y así reza en el pedestal sobre el que, hasta el pasado mes de junio, descansaba un busto en la Alameda Apodaca de Cádiz. El monumento fue inaugurado en noviembre de 1974 tras un regalo de Nicaragua. Ahora ha desaparecido sin que el Ayuntamiento conozca su paradero. El personal de mantenimiento indagó si el busto había sido retirado por algún otro departamento municipal y, tras no tener constancia, procedió a denunciar el suceso a la Policía Local. Agentes municipales rastrearon la zona de mar colindante a la Alameda durante la bajamar durante varios días al caber la posibilidad de que el busto hubiera sido arrojado al mar. Sin éxito.

De forma paralela se puso en marcha un dispositivo de control de los mercadillos de la ciudad por si apareciese la imagen desaparecida, con idéntico resultado.

Ya que las perspectivas de recuperar el busto original parece que se difuminan, la concejalía de Mantenimiento Urbano está trabajando en la elaboración de un nuevo busto para que sea repuesta en el lugar donde ha estado mirando a la Bahía durante cuarenta años. Para ser fiel al original desaparecido se ha localizado la documentación que se guarda en los archivos del Área de Patrimonio.