La presidenta andaluza y precandidata a las primarias socialistas, Susana Díaz, se ha comprometido este jueves a que, si es elegida secretaria general, el PSOE y el PSC serán "muy activos" en ofrecer una solución al debate soberanista catalán, y ha hecho un llamamiento al voto de la "ilusión" y dejar de lado el del "rencor".

Díaz ha visitado Cataluña por primera vez desde que anunció su precandidatura, aunque su primera gran mitin en esta comunidad se hará esperar hasta el día 26 de abril y, por ahora, se ha limitado a una jornada de trabajo en Barcelona para empezar su campaña en tierras catalanas.

En este sentido, ha almorzado en Bellvitge, en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona) con dirigentes de la UGT de Cataluña, entre ellos el líder de ese sindicato catalán y presidente del comité de empresa de SEAT, Matías Carnero; mientras que, por la tarde, se ha desplazado a la sede del PSC en Barcelona para reunirse con dos centenares de activistas de su campaña y, a última hora, verse con el líder del PSC, Miquel Iceta.

En su encuentro con militantes del PSC había dirigentes como el exministro Celestino Corbacho y, entre otros, Isabel López Chamosa, Josep Maria Sala, Joaquim Fernández -el coordinador de la campaña de Díaz en Cataluña-, Óscar Saldaña o Manel Brinquis.

Una visita que ha generado una gran expectación ante la primera visita de Díaz a Cataluña en el marco de las primarias, comunidad a la que además no acudía desde julio de 2016, en un acto en L'Hospitalet junto al presidente valenciano, Ximo Puig, y las alcaldesas catalanas Núria Parlon y Núria Marín.

Recibida en la entrada de la sede de calle Nicaragua por el secretario de Organización del PSC, Salvador Illa, Díaz ha querido dejar claro ante los medios que su voluntad es ir de la mano de los socialistas catalanes para abordar el debate independentista, con el horizonte próximo del referéndum que el gobierno catalán tiene intención de convocar a inicios de otoño.

Mostrando así su absoluto "convencimiento" de que será la próxima secretaria general del PSOE, Díaz ha plasmado su compromiso ante ese desafío: "El PSOE y el PSC vamos a ser activos y muy activos en dar una solución que merecen los ciudadanos de Cataluña y del resto de España", ha afirmado en declaraciones a los periodistas.

Frente a quienes "tienen muy poco que aportar", ya sea porque "no tienen intención de moverse" o porque "recorren un camino que lleva al precipicio", Díaz ha dicho que cuando sea elegida secretaria general "el PSOE y el PSC serán activos en la solución y formaremos parte de ella, desde el diálogo, la negociación y el pacto".

"Y todo eso -ha añadido- en el marco en el que se tiene que desarrollar de manera inmediata", que a su juicio es, "evidentemente", la constitución de la comisión en el Congreso para afrontar la cuestión territorial, ha recordado.

Uno de los objetivos del encuentro con los activistas de su campaña, a puerta cerrada, ha sido coordinar las directrices de su campaña, abordar el mensaje a trasladar en Cataluña y preparar la organización para la recogida de avales, entre otras cuestiones.

Por ello, preguntada sobre sus expectativas en Cataluña y si confía en movilizar el llamado "voto oculto" a su favor, en una comunidad donde la militancia del PSC aparece a priori como más favorable a su rival en las primarias, Pedro Sánchez, Díaz se ha mostrado confiada: "El voto es libre, no es ni oculto ni público".

"Los hombres y mujeres que van a votar el 21 de mayo lo van a hacer pensando en el presente y el futuro. Y pido el voto de la esperanza y de la ilusión. No quiero el voto del rencor. Quiero que pasen página y pongan rumbo al futuro que necesitamos construir juntos. Y sé de la fortaleza que hay", ha señalado.

Y sobre si aceptaría la ordinalidad en el sistema de financiación autonómico, como defiende el PSC, Díaz ha señalado: "No voy a tener problemas en la defensa de la financiación porque voy a defender lo que hace un buen socialista, que es garantizar los servicios públicos en todos los rincones del territorio".

Así, ha recordado que el Documento de Granada, que establece las bases del proyecto federal del PSOE, se plasma que "hay que tener en cuenta en alguno sitios la insularidad, el envejecimiento, la despoblación, el numero de nacionalidades en una aula que necesita mayor integración, la atención a personas en situación de vulnerabilidad... y todo eso nos va a permitir que el nuevo modelo de financiación sea justo, garantice la igualdad y permita poner rumbo definitivamente a la recuperación. Todo eso es compatible".