La discrepancias entre el coordinador general de IU en Andalucía, Diego Valderas, y el portavoz nacional del CUT-BAI (integrado en IU) y diputado Juan Manuel Sánchez Gordillo parecían haberse calmado en los últimos tiempos en aras de la convivencia en el Parlamento andaluz. Pero ayer Sánchez Gordillo irrumpió con un comunicado en el que acusó personalmente a Valderas de ser "el principal responsable" de la "paulatina extinción (de IU) como proyecto plural de la izquierda transformadora en Andalucía". El líder jornalero y alcalde de Marinaleda expresó en la nota el rechazo de este colectivo al acercamiento de la federación de izquierdas al PSOE, la "ausencia de democracia interna" y las "continuas afrentas a la pluralidad del proyecto" que coordina Valderas.

El CUT consideró que la exclusión de la CUT de los actos celebrados con motivo del Día de Andalucía y la expulsión de dos concejales de Chiclana adscritos a la CUT ha sido "la gota que ha colmado el vaso". "Estamos asistiendo al asesinato premeditado de la pluralidad de IU para convertirla en un mero envoltorio electoral del PCE al servicio de los pactos con el PSOE", manifestó Gordillo. Sumó la "falta de voluntad real" de la dirección andaluza de la coalición para resolver el "conflicto" de la provincia de Jaén.

Diego Valderas obtuvo el apoyo del CUT para presentarse como candidato a la Presidencia de la Junta en las elecciones autonómicas y, a cambio, aprobó que Sánchez Gordillo se presentase como cabeza de lista por Sevilla, donde la coalición obtiene los mejores resultados. Valderas se presentó por su circunscripción natural, Huelva, donde obtuvo el escaño por un escaso margen de sufragios.