Socialistas y populares continúan enzarzados en la gresca de los cursos de formación. Lejos de bajar la intensidad de sus ataques, insisten en sus acusaciones. Ayer, la portavoz del PP-A en el Parlamento, Carmen Crespo, anunció que su formación pedirá "importantes" responsabilidades políticas en la comisión de investigación sobre las ayudas a la formación, al tiempo que consideró una "desvergüenza política" que el vicepresidente de la Junta y consejero de la Presidencia y Administración Local, Manuel Jiménez Barrios, llame "montaje" a este fraude y que actúe como si fuera una "víctima" de lo sucedido.

La parlamentaria del PP-A, que recordó que la Junta ya mantuvo esta misma actitud con el caso de los ERE fraudulentos, asegurando que era una cuestión "de tres o cuatro golfos", destacó que esta causa ha sentado en el banquillo "a más de 20 años de socialismo andaluz". "¿Es un montaje las comilonas que se recogen en las facturas de formación? ¿Es un montaje las redes familiares? ¿Es un montaje las 45 empresas que han recibido 101 millones y que son de la red clientela cercana al PSOE-A?", preguntó Crespo a Jiménez Barrios.

La portavoz popular apuntó que si la comisión de investigación creada en el Parlamento sobre la formación se ha cerrado ha sido por la "falta de colaboración" del PSOE-A y por la "alergia" de la presidenta de la Junta, Susana Díaz, a la transparencia y al envío de documentación. Así, tras lamentar que todavía no haya llegado al Parlamento la documentación relativa a la auditoría de la extinta Fundación Pública Andaluza Fondo de Formación y Empleo (Faffe), Crespo se ha mostrado convencida de que desde el Gobierno andaluz y el PSOE-A se está respondiendo "con excusas, ataques y victimismo".

La portavoz parlamentaria del PP-A, quien también espetó a Jiménez Barrios sobre "quién restituye a los parados todo lo que ha ocurrido en los fondos de formación", emplazó a la Junta a pedirles perdón, en primer lugar, y después "investigar, colaborar y mandar toda la información al Parlamento".

El PP-A está trabajando en la elaboración de las conclusiones de la comisión de investigación. Crespo pidió a los grupos de la oposición que sean "valientes" en relación a las responsabilidades políticas que deben dirimirse, anunciando que las que el PP-A pedirá serán "importantes".

Jiménez Barrios, por su parte, denunció una "operación de montaje" del PP-A y dijo que confía en que se produzca el archivo de la causa abierta en los tribunales. El número dos del Ejecutivo afirmó que la comisión de investigación creada en el Parlamento ha demostrado que la Junta ha colaborado "estrechamente" en conocer lo ocurrido y que se "ha caído estrepitosamente" la "farsa" del PP-A con las comparecencias en este órgano. Para el vicepresidente, tanto el interventor general de la Junta como los interventores provinciales manifestaron que no había menoscabo de fondos y que tampoco había instrucciones políticas al respecto, sino que las actuaciones realizadas han cumplido con la ley establecida en la comunidad y que no había ninguna "trama".