"Llevamos ya más de ocho años asistiendo a la estrategia dilatoria de las tabaqueras y aún seguimos discutiendo las formas y la jurisdicción competente en esta materia, que no es otra que el que la industria se responsabilice de los daños causados a personas fallecidas de cáncer de pulmón y que supusieron un gasto en salud de las administraciones". La consejera de Salud, María Jesús Montero, reprochó ayer que en el proceso abierto por la Junta contra las tabaqueras no se entre "en el fondo de la cuestión" y mostró su confianza en que el recurso contencioso-administrativo abierto por su departamento por vía patrimonial en la Audiencia Nacional desbloquee la denuncia.

Para la Junta no ha habido ninguna sorpresa en este revés judicial, fruto de la demora que implica no haber definido todavía el tribunal competente.

Montero recordó que cuando la Audiencia Nacional ya se pronunció en contra del recurso que interpuso la Junta -lo que obligó a elevar el mismo ante el Supremo, que ahora ha sido rechazado-, la Administración andaluza abrió como nueva vía un recurso contencioso-administrativo por vía patrimonial del Estado ante el mismo órgano judicial. "Aún estamos pendientes de que la Audiencia se pronuncie", dijo Montero. La titular de Salud mostró su confianza en que a través de este nuevo cauce "podamos por una vez discutir las cuestiones que hay detrás de los expedientes que presentamos contra las tabaqueras, que no son otras que la de demostrar que la industria, aun a sabiendas de que manipulaba la voluntad del ciudadano, no le informaba de los riesgos que tenía la sustancia que consumía".