Se hace raro en estos días ver a una madre dando el pecho a su hijo, más cuando se hace en público, pero ayer, unas 80 madres se reunieron en el granadino Parque García Lorca para reinvidicar su normalización. Convocadas por el Grupo de Apoyo Mamilactancia, celebraron en una jornada de convivencia (a la que se unieron decenas de familias) la finalización de la Semana Mundial de la Lactancia Materna.

Este acontecimiento que se celebra en todo el mundo lleva conmemorándose desde hace siete años en el Parque García Lorca, cuenta la presidenta de Mamilactancia, Cándida Cabrera. Explica que aquí se han dado cita tanto madres que están dando de mamar a sus hijos, como las que van a darlo en breve, porque acudieron también muchas embarazadas.

Así, muchas familias que paseaban ayer domingo por el parque se unieron a la fiesta que contó con un taller de animación infantil, otro de artesanía, actuación musical y stands de información para dar a conocer la labor del grupo de apoyo.

Este año, el lema quiere impulsar los diez pasos Hacia una atención humana del nacimiento y la lactancia. Recogidos en la Declaración de Innocenti de 2005 y apoyados por Unicef y la Organización Mundial de la Salud (OMS), son "los que tiene que dar la sociedad, las instituciones y en especial los hospitales para favorecer el éxito de la lactancia materna", dice Cabrera. Siguiendo estas diez acciones, los centros sanitarios y las comunidades pueden conseguir el certificado 'Amigo de las madre y los niños'.

El papel de los hospitales es clave por ser el lugar del alumbramiento. Y es que, "según muchos estudios, las lactancias que comienzan en la primera hora de vida se prolongan más en el tiempo y tienen más posibilidades de éxito". "Es importante que cuando un bebé nace, se den las circunstancias para que pueda estar directamente encima de la madre y pueda engancharse a la teta", apunta.

La presidenta de Mamilactancia indica que los centros de Granada "están avanzando muchos pasos en poco tiempo", en parte porque muchos profesionales se están formando para ello. Así, muestra su satisfacción porque en el Hospital Clínico San Cecilio y el Virgen de las Nieves admitan desde hace tiempo "planes de parto para que las madres puedan decidir cómo quieren parir, a través de un documento". Si el testamento vital garantiza que se respeten las condiciones de la muerte, con esta iniciativa una madre puede estar tranquila de que se seguirá su deseo en el momento de dar a luz una nueva vida.

Cabrera cuenta que los beneficios de la lactancia materna son muchos, una idea que "está muy extendida". Han detectado un repunte de las madres que la practican y frente a lo que era antes "una frase que nos decían las abuelas, ahora es un hecho demostrado por numerosos estudios".

Así, desde Mamilactancia -que cuenta ya con 100 socias- aseguran que "es lo más beneficioso tanto para el bebé, como para la madre", llegando sus efectos a la salud física y mental. Evita las depresiones post parto y es bueno a largo plazo contra el cáncer de mama -con hasta un 80% más de protección- y otras enfermades, pero también para aumentar el vínculo con el hijo.

Pero no siempre encuentra la madre las circunstancias favorables para dar el pecho a su bebé cuando lo hace en público. Cabrera afirma que, aunque "el problema está en los ojos del que mira, hasta la asociación llegan casos en los que se lo han impedido y de inmediato, acuden para solucionar el tema con los responsables del lugar. Con esta tetada pública, se quiere "normalizar la imagen", al igual que lo está dar el biberón.