La revolución digital que supone la implantación del denominado papel cero en la Justicia arranca a medio gas. La reforma de la ley de Enjuiciamiento Civil (ley 42/15, de 5 de octubre) entró en vigor ayer, 1 de enero, fecha que ha cambiado radicalmente la forma en la que los abogados y procuradores se comunican con los juzgados y tribunales. Desde este momento, el papel queda obsoleto en la mayoría de los casos para dar paso a una especie de "nube" judicial, a la comunicación telemática a través del sistema Lexnet. Pero esta revolución arranca limitada a la jurisdicción Civil, a los juzgados de Primera Instancia, mientras que los juzgados de lo Contencioso-Administrativo y de lo Social se incorporarán en algo más de mes y medio, entre febrero y marzo, según los plazos que baraja la Consejería de Justicia e Interior de la Junta.

Este retraso es de orden interno, de organización de la Administración de Justicia, pero no afecta, en principio, a los abogados y procuradores, quienes tienen desde el día 1 de enero la obligación legal de presentar sus escritos vía internet en aquellos casos que inician los procedimientos, para los pleitos nuevos, según aclaró el decano de los abogados de Sevilla, José Joaquín Gallardo. Para los que ya están tramitándose en la actualidad, antes de la entrada en vigor del papel cero, no se exige la presentación de documentos por medios telemáticos.

Aunque los profesionales tendrán que enviar sus escritos y documentos vía internet a partir de la fecha fijada, al no ser este día hábil en la Administración de Justicia, el primer reparto electrónico de asuntos a los juzgados de Primera Instancia no tendrá lugar hasta el próximo lunes, 4 de enero. El primer día no se espera una avalancha de nuevos asuntos, al coincidir con la celebración del año nuevo y porque muchos letrados se han apresurado a presentar en los días previos las demandas para no coincidir con la implantación del nuevo sistema, dada la incertidumbre que surge siempre que se produce un cambio o se introduce una novedad en una administración como la de la Justicia, donde los cambios suelen tardar algún tiempo en asimilarse.

El problema, según explicó el juez decano de Sevilla, Francisco Guerrero, radica en la integración de los nuevos procedimientos en el Portal Adriano, el sistema informático de la Justicia en Andalucía. El decano de los jueces señaló que desde el día 1 de enero los abogados y procuradores tendrán que remitir telemáticamente sus escritos y documentos a través del sistema Lexnet a la oficina de registro y reparto del decanato, donde se remitirán vía electrónica al juzgado de Primera Instancia que corresponda.

En las jurisdicciones Contencioso-Administrativa y de lo Social, al no estar integradas plenamente en el sistema de comunicaciones telemáticas, el decanato tendrá que imprimir las demandas que reciban de estos profesionales y remitirlas en formato papel a los órganos judiciales, como se venía haciendo hasta ahora.

A pesar de que la implantación no va a ser plena desde el principio, Francisco Guerrero se mostró optimista con respecto al papel cero. "Espero que el sistema Lexnet funcione igual de bien para la presentación de los documentos que lo está haciendo en el caso de las notificaciones", precisó el decano, que añadió que los jueces tienen que hacer "todo lo posible para garantizar la tutela judicial efectiva" de los ciudadanos.

Sobre el arranque de la implantación del nuevo sistema, Francisco Guerrero indicó que será "la práctica y lo que se decida con los acontecimientos que puedan suceder lo que irá solventando las posibles incidencias que puedan producirse".

El decano de los abogados, José Joaquín Gallardo, también es optimista con el nuevo sistema a pesar de que considera "lógico y comprensible que existe un miedo al cambio" que supone la introducción de esta tecnología en la Justicia. "A medio plazo no cabe duda de que el sistema será positivo, pero la medida ha tardado muchos años en ponerse en marcha y hace falta una inversión en infraestructuras", destacó José Joaquín Gallardo.

El decano de los abogados elogió las posibilidades que tiene "la Justicia online 24 horas y la informatización global del sistema de esta Administración", pero pidió, sobre todo, al inicio de la puesta en marcha una "mayor flexibilidad ante las incidencias que puedan producirse, todo ello con la idea de garantizar la tutela judicial efectiva de los ciudadanos".

En el caso de los procuradores, la introducción del papel cero no va a suponer ningún cambio importante, dado que estos profesionales han sido pioneros en el uso de las nuevas tecnologías y ya llevan más de tres años funcionando de forma totalmente informatizada. La decana de los procuradores de Sevilla, Isabel Escartín, recordó recientemente que el año pasado se realizaron 80 millones de notificaciones telemáticas en España, lo que supuso una "enorme reducción de la cantidad de papel de los juzgados y el consiguiente ahorro".

La reforma de la ley de Enjuiciamiento Civil que entró en vigor ayer prevé expresamente, en la nueva redacción del artículo 273, que "todos los profesionales de la Justicia están obligados al empleo de los sistemas telemáticos o electrónicos existentes en la Administración de Justicia para la presentación de los escritos, iniciadores o no, y demás documentos, de forma tal que esté garantizada la autenticidad de la presentación y quede constancia fehaciente de la remisión y la recepción íntegras, así como de la fecha en que éstas se hicieren".

La medida acabará, en principio, con las habituales colas en los registros generales de los decanatos y audiencias provinciales para la presentación de escritos y afectará a todas las jurisdicciones -cuando lo habilite la Junta-, así como a los profesionales de la Justicia, las oficinas judiciales y la Fiscalía. El Ministerio de Justicia pretende con esta reforma que la Justicia abra las 24 horas, porque de esta forma se posibilitará la presentación de los escritos y documentos en cualquier momento del día, si bien los mismos no tendrán efectos procesales hasta la primera hora hábil en caso de que el envío se produzca de madrugada. El objetivo es acelerar los pleitos, modernizar la Justicia, y reducir los costes.