El consejero de la Presidencia, Manuel Jiménez Barrios, aseguró ayer que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, "debería mandar parar" la estrategia de "ataque a las instituciones" del PP-A. Jiménez Barrios calificó de "lamentable" la suspensión de la comisión de Hacienda el pasado lunes y responsabilizó a la presidenta de la comisión, Dolores López Gabarro, del PP.

La presidenta de la misma suspendió la comisión a los 20 minutos ante la ausencia de diputados de PSOE e IU y de la propia consejera de Hacienda, María Jesús Montero, que entendieron que no deberían estar presentes hasta que se resolviese un recurso del PP en la Mesa del Parlamento. El PP había pedido que no se debatiese el proyecto al no estar provincializadas las cuentas. La comisión finalmente se celebrará hoy.

Jiménez Barrios aprovechó una pregunta sobre la situación de El Correo de Andalucía en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno para, sin pregunta mediante, ofrecer la versión del Gobierno andaluz.

La suspensión dio pie a la trifulca de los partidos políticos y ayer, en lugar de llamar al sosiego, el consejero de Presidencia prefirió echar más leña al fuego. El consejero opinó que la suspensión de la comisión obedece a una "estrategia perfectamente orquestada para dinamitar una vez más las relaciones institucionales y el consenso político" y recordó el "acoso" a la presidenta de la Junta en Málaga o la filtración de los Presupuestos llegado al Consejo Consultivo por parte del PP.

El portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Carlos Rojas, anunció ayer que su partido va a pedir amparo al Tribunal Constitucional (TC) para que el Presupuesto de la Comunidad Autónoma andaluza de 2014 presente las inversiones por provincias y cumpla, por tanto, la Ley General de Hacienda Pública de la Junta, que establece en su artículo 34.2 que "los gastos de inversión se clasificarán territorialmente".