El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, ha pedido al grupo parlamentario socialista comparecer personalmente en la comisión creada para investigar los ERE irregulares. Y esto a pesar de que, como ha reconocido el propio dirigente, "el grupo tiene su propio parecer" al respecto, que es contrario a su comparecencia.

Griñán, que ha acudido esta mañana a la presentación de la memoria del Consejo Consultivo de Andalucía en Granada, ha justificado su deseo de comparecencia: "Debo decir muchas cosas importantes", sobre todo para aclarar "cuestiones que se están diciendo y que no se ajustan a la realidad". El dirigente andaluz tiene interés en que la comisión creada en el Parlamento de Andalucía sirva para "investigar a fondo lo ocurrido" y considera que él puede aportar datos importantes.

Sin embargo, respecto a la posibilidad de que su antecesor en el cargo, Manuel Chaves, deba comparecer en la misma comisión, Griñán se ha mostrado esquivo, derivando la responsabilidad de esa petición en los grupos parlamentarios. "Yo he hablado por mí mismo. Los grupos parlamentarios pedirán comparecencias y se determinarán cuáles son", ha agregado el presidente andaluz.

Sobre la designación del diputado de IU Ignacio García para presidir la comisión de investigación de los ERE irregulares financiados con fondos públicos Griñán se ha mostrado favorable e incluso ha tenido palabras de elogio para el político de izquierdas: "Es un excelente parlamentario".

La petición del presidente andaluz para comparecer no se ha producido formalmente porque, como ha explicado el mismo interesado, en su partido esas fórmulas no son necesarias, solo es necesario transmitírselo al portavoz del grupo parlamentario socialista. Los periodistas han preguntado también a Griñán por las novedades del caso, las cuatro nuevas imputaciones de la juez Alaya: el exviceconsejero de Empleo Agustín Barberá, los ex directores generales de Trabajo Juan Márquez y Daniel Alberto Rivera y el exdiputado del PSOE Ramón Díaz Alcaraz. Sobre el asunto, el socialista se ha limitado a decir que la postura de la Junta es de "colaboración con la Justicia para el esclarecimiento de los hechos".

Durante su comparecencia ante los medios, el presidente andaluz ha incidido también en los temas de política económica nacional y mundial, dada la gran repercusión que todo esto está teniendo en las políticas de ajustes que su Gobierno está "obligado" a llevar a cabo en Andalucía. Un día después de que la Junta haya aprobado su paquete de medidas para reducir el gasto, el presidente andaluz ha denunciado el "enorme error" que está suponiendo la búsqueda de una solución a la crisis mediante los ajustes. "Esto es un comino a ninguna parte", ha declarado el dirigente, que atribuye el 95% de los recortes en Andalucía a la política del Gobierno estatal de Rajoy.

Griñán ha hecho mucho hincapié en que los ajustes no van a propiciar despidos en Andalucía y por eso se van a recortar los sueldos. También ha insistido en su apuesta por los servicios públicos, en especial por la educación, que "seguirá siendo el objetivo preferente".

El presidente andaluz ha propuesto un gran pacto nacional, entre todos los partidos políticos, los empresarios y sindicatos, para reivindicar el valor de España. "Ahora que el Gobierno tiene clara su posición estamos de acuerdo" en que el Banco Central Europeo tiene que intervenir y que tiene que haber una política fiscal y económica común. Con estas reivindicaciones claras, Griñán cree que es necesario un gran pacto para que de España salga una sola voz.