La propuesta del vicepresidente de la Junta, Diego Valderas, de retirar las ayudas y subvenciones a los ayuntamientos que mantengan símbolos franquistas ha encontrado una férrea oposición en Granada. Si en un principio la iniciativa fue tachada de "bravuconada" desde el Ayuntamiento, ayer el alcalde, José Torres Hurtado (PP), se mostró mucho más tajante e indicó que, de llevarse a cabo la medida, el Consistorio no tendrá otra opción que recurrirla pues, según su opinión, este reglamento crearía una jurisprudencia que "no se puede permitir".

Torres Hurtado enfatizó que "el único monumento que tenemos es premio Nacional", refiriéndose a la estatua dedicada al fundador de la Falange, José Antonio Primo de Rivera, situada en la plaza de Bibataubín, y matizó que será la Ley de Memoria Histórica la que tendrá que decidir de qué forma se deben compatibilizar estos símbolos.

El alcalde acusó a Valderas de actuar desde "una postura totalitaria", al creer que por gobernar la administración pública "la pueden utilizar a su antojo". Torres Hurtado e insistió en que la Junta tiene "una obligación con los ayuntamientos que es absolutamente independiente de las circunstancias legales que haya en otros casos". El alcalde remarcó que, en el caso de ejecutarse, "Izquierda Unida estará cometiendo una infracción grave", sin ningún apoyo en la normativa vigente que supondría una grave irregularidad administrativa.

Valderas anunció esta medida el pasado miércoles. Aunque indicó que la propuesta debe tener el visto bueno de los plenos municipales, remarcó que le parece "injustificable", que todavía hoy "haya quien se aferre a los símbolos de la dictadura", y añadió que su consejería no cejará en el impulso del cumplimiento de la ley, para lo que recurrirán a sanciones a los ayuntamientos de los municipios que se nieguen a retirar los citados símbolos de sus plazas y calles.