Ciudadanos ya tiene calculada la cantidad que le costará al PSOE su apoyo a los Presupuestos autonómicos para 2017. Serían unos 500 millones de euros, a lo que habría que sumar los 120 millones que costará la reforma del Impuesto de Sucesiones y Donaciones que ya está pactada y funcionando de forma parcial. Como en la negociación de las cuentas vigentes, las propuestas del partido naranja pasan por política fiscal, laboral y el mantenimiento del Estado de bienestar, entre otras materias.

Lo explicó Juan Marín ayer en una rueda de prensa donde también anunció la posterior reunión que mantuvo en el Parlamento con la consejera de Hacienda y Administración Pública, María Jesús Montero. Esta primera toma de contacto fue posible gracias a que la formación naranja está satisfecha con el cumplimiento de los acuerdos pactados el año pasado. En concreto, fuentes de Ciudadanos cifraron en un 60% el nivel de ejecución de sus enmiendas.

Lo que no trataron ayer Marín y Montero, según adelantó el líder naranja por la mañana, fueron las iniciativas que están negociando de forma paralela PP y Ciudadanos. Marín aseguró que los populares "no han cuantificado" ninguna de las medidas tratadas en sus reuniones, por lo que tendrán que esperar para entrar en las conversaciones entre el partido naranja y el Gobierno andaluz. "Ciudadanos no hace un brindis al sol", apostilló el dirigente gaditano.

El portavoz regional de la formación naranja aseguró que su grupo no pide "imposibles", pero una de las propuestas anunciadas ayer choca frontalmente con la intención del Ejecutivo socialista de no hacer nuevas rebajas fiscales en 2017. Montero ha reiterado en varias ocasiones que el cupo de reducciones impositivas del año que viene está cubierto con la modificación del impuesto de Sucesiones y Donaciones, por lo que la nueva bajada del tramo autonómico del IRPF mencionada ayer por Marín podría ser un escollo en las negociaciones.

Otras iniciativas van en consonancia con lo que Ciudadanos ya pidió el año pasado. En política laboral, el partido naranja apuesta por un plan de lucha contra el fraude de los falsos autónomos. El colectivo de trabajadores por cuenta propia es prioritario para la formación, por lo que habrá medidas para favorecer la contratación. Destaca también la puesta en marcha de un plan de pago para entidades con falta de liquidez pensado para los ayuntamientos con una dotación por precisar.

El mantenimiento del Estado de bienestar es otra propuesta clásica de Ciudadanos y aquí va de la mano del PP. La intención del partido naranja es aumentar la inversión en sanidad y educación en un 4,7% para "llegar al nivel de convergencia" con el resto del país. La eliminación de las caracolas en los colegios andaluces y la restitución del salario a los profesores de la enseñanza concertada -con un coste de 32 millones- son dos las dos medidas adelantadas en el ámbito educativo. En materia de dependencia, Marín defendió un aumento del gasto en 25 millones de euros, que se sumaría a la cantidad ya aumentada en el Presupuesto vigente. Además, Ciudadanos reclamará a Montero el compromiso de desarrollar plenamente el decreto de la Atención Infantil Temprana.

La reducción de entidades que integran la Administración autonómica se repite entre las metas de Ciudadanos. Para el próximo ejercicio, el objetivo está en reducir entre un 6% y un 7% la cantidad de entes instrumentales para llegar al 25% de disminución en toda la legislatura. La formación naranja también insiste en la necesidad de luchar contra el fraude y la corrupción, en aumentar la transparencia y la regeneración democrática, por lo que apuestan por subir el gasto en esas materias.

Como novedad, destaca la propuesta de invertir un millón de euros en aumentar las plazas de bomberos forestales y agentes del medio ambiente, así como de incrementar en diez millones el presupuesto de justicia para "dignificar el trabajo de los abogados de oficio".

Ninguna de las partes quiso dar detalles de la reunión que mantuvieron en la Cámara autonómica, pero fuentes de la Consejería de Hacienda afirmaron estar trabajando "por un presupuesto que sea bueno para Andalucía". Todo ello pese a la incertidumbre provocada por la ausencia de Gobierno en Madrid y el desconocimiento de la cantidad que supondrán las entregas a cuenta del Ejecutivo central y la liquidación del sistema de financiación autonómica. Precisamente por ese concepto la Junta de Andalucía deberá recibir una cantidad importante, puesto que la liquidación de 2014 debe ser positiva al tratarse del ejercicio del comienzo de la recuperación económica.