"Vacuna que llega, vacuna que se pone". La consigna de Elías Bendodo, consejero de Presidencia y portavoz de la Junta, no es nueva, pero ha pasado el suficiente tiempo para comprobar que, de momento, se cumple. Con ese mantra, Andalucía aspira a poner la primera dosis al 70% de los mayores de 16 años "a finales de junio", según ha revelado el consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre. El 40% de esa población diana deberá tener para entonces los dos pinchazos, ha añadido el dirigente andaluz.

Para ello tendrá que aumentar el ritmo de vacunación, a pesar de que ya se ha alcanzado la inmunización del 10% de la población y se ronda el 25% con una dosis. La semana pasada se pusieron en Andalucía 343.000 dosis del fármaco contra el Covid-19, y la previsión es que esta semana lleguen 593.270 dosis. El Gobierno andaluz quiere ponerlas todas y, para ello, ha puesto en marcha el "plan un millón", es decir, ha activado los recursos para poder administrar esa cantidad de dosis a lo largo de una semana. 

Para lograrlo, la Consejería de Salud y Familias pretende contar con muchos de los 14.000 profesionales sanitarios formados por la Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP). Ahí están trabajadores en activo del SAS, pero también médicos jubilados y estudiantes del último curso de Medicina y Enfermería. El plan, que se aprobará la semana próxima en Consejo de Gobierno, amplía a 300 el número de puntos de vacunación desde los 271 actuales.

En las capitales se cuenta con grandes infraestructuras, algunas de las cuales ya se utilizan y otras, como el Palacio de Ferias y Congresos de Málaga, empezará a funcionar este miércoles para ir ampliando de forma paulatina el número de dosis. En los municipios más pequeños se utilizarán los polideportivos, mientras que en zonas rurales y urbanas donde la tipología de los centros de salud permita crear un circuito independiente seguirán utilizándose. A ello hay que sumar las unidades móviles y una apuesta por el uso de zonas de espera adaptadas o climatizadas en previsión del aumento de las temperaturas en la comunidad.

El plan se aprobará la semana que viene, pero el consejero de Salud, Jesús Aguirre, ha admitido que no será necesario utilizarlo, como mínimo, hasta finales de mayo. La previsión en la segunda y la tercera semana de mayo es que lleguen menos vacunas que en esta, situación que finaliza en mayo. En la última semana del mes y ya en junio Aguirre espera poder contar con unas "800.000 o 900.000 dosis", es decir, que lleguen suficientes viales para acercarse a ese millón de pinchazos a la semana, ya que para entonces podrían entrar en el plan estatal de vacunación los fármacos de Novavax y Curevac, los dos laboratorios que están a la espera de la aprobación de la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés).

Petición para el uso de Astrazeneca en todas las edades

Aguirre ha aludido al criterio de esta agencia europea para desvelar que este miércoles volverá a pedir a la ministra de Sanidad, Carolina Darias, que levante los límites de edad para la vacuna de Oxford-Astrazeneca. "Se tiene que instalar el rigor científico", ha dicho Aguirre en referencia al permiso de la EMA, pero también a una petición de "17 peticiones científicas". 

El objetivo del consejero es acelerar ese ritmo de vacunación y también poner la segunda dosis a aquellos profesionales esenciales de menos de 60 años que recibieron el pinchazo a principios de año. Estas limitaciones provocarán que, si no cambia la norma, a final de esta semana se queden en las neveras "150.000 dosis" de Astrazeneca ya que, en estos días, con el envío de 280.000 unidades de este elixir, Salud agotará la población a la que puede inmunizar con el fármaco.

El levantamiento de esas limitaciones de edad permitiría también avanzar en la protección de las personas con menos de 60 años, aunque hay zonas de Andalucía donde el proceso de inmunización ya ha llegado a este grupo etario. Se trata de áreas en las que la pirámide de población cuenta con menos personas mayores de esa edad y ya se están utilizando los fármacos de Pfizer y Moderna con estas personas, ya que son las únicas que están permitidas para los menores de 60. 

Con esta misma fórmula se vacunarán en las próximas semanas a los estibadores, ya que, según ha explicado Aguirre, se ha constatado que las "nuevas cepas" pueden entrar por los los puertos, como ha ocurrido, por ejemplo, en Bilbao. El titular de Salud ha explicado también que la Junta ha propuesto vacunara inmigrantes, temporeros y las personas que viven en asentamientos con la vacuna de Janssen, ya que sólo necesita un pinchazo y se trata de personas que podrían presentar problemas para su localización en el momento de inocularles la segunda dosis.