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Listas de espera en los viveros para comprar plantones de almendros

  • Es el cultivo de moda y se está plantando en intensivo de regadío o secanos buenos. Sevilla, Córdoba y Huelva lideran el crecimiento.

De cultivo residual a cultivo de moda. El buen precio de la almendra, un mercado creciente y, sobre todo, un precio que en los últimos años se ha doblado son -además de la crisis en los cultivos tradicionales- algunas de las razones por las que el cultivo del almendro está de última moda en Andalucía. Y lo está hasta el punto de que los plantones en los viveros están agotados y quien quiera tenerlos -no ya para este año sino para el que viene- tiene que reservar y ponerse en lista de espera.

Un ejemplo de lo que está pasando es el anuncio que un vivero especializado tiene en su web y que dice: "Debido a la gran demanda que hay en el sector, la planta de almendro producida para la venta del invierno está totalmente agotada, tanto la planta de maceta como la de producción de vivero de campo. La próxima fecha de entrega de almendros en maceta sería para mayo de 2015, mediante reserva previa". En la misma tónica, Isabel Usero, responsable de la línea de almendros en Almeriplant un vivero especializado de Almería, asegura que "hay muchísima más demanda que otros años. Hemos duplicado la producción." Y aun así trabajan sobre pedido y con disponibilidades limitadas a la anticipación con que se haya hecho esa reserva. De hecho, para este invierno, buena fecha para los plantones con raíz, ya no hay existencias, según explica Antonio Caro, especialista en el cultivo de Asaja Sevilla.

Hasta ahora en Andalucía se venían cultivando unas 150.000 hectáreas y se producían unas 40.000 toneladas de almendras, según datos de la Junta de Andalucía fechados en 2012. La principal productora era Granada, seguida de Almería y Málaga. Pero donde está creciendo exponencialmente el cultivo ahora es en Sevilla, Córdoba y Huelva. En Sevilla, según datos de Asaja, se está plantando sobre todo en el Aljarafe -que poco a poco abandona el cultivo de aceituna manzanilla cada vez menos rentable- y también en las zonas de Dos Hermanas, Lebrija y otros puntos del Bajo Guadalquivir y La Campiña. Los últimos datos oficiales (2012) daban cuenta de 1.670 hectáreas ya plantadas en la provincia de Sevilla, pero el boom ha venido precisamente a partir de esa fecha. Según Antonio Caro, sólo en Lebrija hay ya al menos 500 hectáreas.

El almendro es un cultivo que se puede dar en regadío y en secano pero es sobre todo en regadío como se está plantando ahora. Además, el almendro tiene la ventaja de ser un cultivo totalmente mecanizado y perfectamente compatible con el olivar, pues se usa la misma maquinaria para uno y otro, incluso se recolectan con los mismos vibradores. Por esta razón -explica Antonio Caro- muchos agricultores sevillanos están diversificando sus explotaciones con almendros. La modalidad de estas nuevas plantaciones es la de un cultivo intensivo, algo similar a lo que pasó con la reconversión de olivares tradicionales a intensivos o superintensivos. Según datos de Asaja, se están plantando sobre todo variedades tardías y autofértiles (macho y hembra en la misma planta) y se plantan de forma que van unos 200 árboles por hectárea. El coste viene a salir en unos 3.000 o 4.000 euros por hectárea. Los árboles tardan cuatro o cinco años en estar a un 80% de producción. Pero a pesar de todo ello a los agricultores les salen las cuentas y calculan que la inversión puede estar amortizada en pocos años. Hay que tener en cuenta -señala Antonio Caro- que en un intensivo se puede llegar a obtener hasta los 1.200 o 1.500 kilos de grano por hectárea.

Juan Pérez, responsable de la sectorial de COAG, hace un análisis bastante parecido y dice que el almendro en Andalucía había venido siendo un cultivo residual, de segundo orden, al que "se le dedicaban ratos perdidos", pero de pronto se ha convertido en una primera opción por su nueva rentabilidad: "Hace tan sólo tres años se pagaban 3 euros por kilo y ahora se pagan 7 euros. En cuanto a producción, si en secano se producen 1.000 kilos por hectárea de almendras que se traducen en unos 400 0 500 kilos de frutas, en regadío se multiplica hasta los 2.000 kilos hectárea y mil kilos de fruta".

Las perspectivas de mercado también son buenas. La demanda de almendra crece a un ritmo del 5% anual y actualmente la producción es insuficiente. En concreto en España somos deficitarios e importamos prácticamente el doble de lo que producimos. En el incremento de la demanda ha influido sobre todo el crecimiento de países como China e India, que por sí solos mueven mercados, y también la creciente buena fama de los frutos secos como productos muy saludables que promociona hasta la OMS.

La gran pregunta es si la producción seguirá siendo insuficiente cuando entren en producción todas las nuevas plantaciones que se están haciendo. Y la respuesta de los expertos es que "en principo sí" porque no hay otras zonas en expansión a nivel internacional. Juan Pérez, señala al respecto que "el gran productor ha sido tradicionalmente California, en concreto su valle central, y allí no tienen nuevas perspectivas de expansión". Asimismo, Antonio Hidalgo, de la sectorial de Faeca dice que "las potencialidades de España en este mercado son la disposición de una almendra de gran calidad y una industria adaptada a las necesidades del mercado europeo a lo que se une la facilidad de transporte con el resto de Europa".

En cualquier caso, Andalucía no es la única comunidad que se ha vuelto loca por el almendro: en todo el Levante se están sustituyendo cítricos por almendros e incluso en lugares más fríos como Toledo o Zaragoza hay un verdadero boom y se están plantando miles de hectáreas aunque con variedades de floración tardía, para huir del riesgo de las heladas.

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