La vie en rose por Carolina Herrera

CH pinta la Manzana de rosa

Minivestido de Jeremy Scott

Minivestido de Jeremy Scott

Carolina Herrera ha pintado de rosa la Gran Manzana en la Semana de la Moda de Nueva York.stye> Y lo ha hecho con una colección que remarca, más si puede, su condición de gran dama de la moda neoyorquina; pisando fuerte en uno de los locales con más encanto del alto Manhattan, la prestigiosa Flick Collection.

Sus modelos, que en esta ocasión han estado coloreadas con una amplia paleta de rosas, desde el rubor más pálido hasta el fucsia más impactante, han compartido espacio con obras de grandes pintores como El Greco o Rembrand.

Carolina Herrera no diseña alta costura, ni falta que le hace. Sus creaciones llegan envueltas en la misma elegancia y están realizadas con el mismo mimo que cualquiera de las que desfilan en las pasarelas de París.

En esta ocasión hace una apuesta por la mujer más sensual, a la que envuelve en organzas y sedas y ofrece pequeños toques en tul, atreviéndose incluso hasta con plumas. CH hace la moda que le gusta y la que acepta gustosa la clase alta neoyorquina; ni está atenta a las tendencias ni se afana por marcarlas. Pero como Nueva York es cosmopolita, su Semana de la Moda no podía ser de otra forma.

No en vano ha tomado la inspiración en sus propios días de descanso en la paradisiaca isla de Mustique y no ha dejado a un lado ni siquiera los estampados de flores tropicales.

Sus modelos no desfilaron con rastas porque eso ya sería tirar piedras sobre su propio tejado y cargarse de un plumazo su reputación de niño bien, pero sí lo hicieron con sombreros jamaicanos, con triquinis de croché y sobre una pasarela de lo más playera en la que no faltó arena real de la playa ni hasta un pequeño lago y un chiringuito.

Tommy muestra en su colección Primavera-Verano 2016 su lado más artesanal, con piezas que esconden mucho trabajo manual y cargada de colores ricos y degradados isleños en tejidos ligeros y vaporosos.

El contrapunto de estos últimos días llegó de la mano de Jeremy Scott, que presentó una colección llena de referencias pop y mucho sentido del humor.

El también director creativo de Moschino, apuesta en esta ocasión por una primavera llena de colores vivos y charoles, en los que los minivestidos y los top que dejan libre el ombligo son piezas obligadas.

Artículo publicado por I. B. en Diario de Sevilla

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