El 2015 ha sido un año redondo para ella tanto en lo personal como en lo profesional. Cristina Pedroche lo despide junto a Carlos Sobera en la Puerta del Sol. La presentadora se siente emocionada por dar las Campanadas esta noche en Antena 3.

-Segundo año consecutivo presentando las Campanadas, ¿se siente menos nerviosa que la primera vez?

-Estoy más o menos igual que el año pasado. Dar las Campanadas es algo muy bonito, que nunca sabes si va a volver a ocurrir. Y eso se suma a la ilusión de comerte las uvas, cambiar de año... Así que algo de nervios sí que tengo.

-La expectación por el vestido que lucirá esta noche es muy grande, ¿provocará tantas reacciones como el año pasado hicieron las transparencias?

-Seguro que sí, he intentado que este año marque más que el pasado. Habrá muchos comentarios tanto buenos como malos. Nadie ha presentado las Campanadas con un vestido así. Yo siempre intento que sea especial lo que hago y cómo lo hago y creo que vamos a conseguirlo.

-¿Cómo ha sido el proceso de búsqueda del vestido?

-Tenía una idea en la cabeza y se la conté al estilista Josie. Lo primero que me dijo fue que había que hacerlo con una marca española. Yo le dije que lo que necesitaba es que el vestido fuera mío, que la idea se plasmara de la mejor forma. Él tuvo claro que tenía que ser Pronovias la firma encargada del diseño y yo encantada. Es un vestido exclusivo, hecho para mí, y en Pronovias han entendido mi idea a la perfección. Ha quedado mejor de lo que yo había imaginado.

-¿Puede desvelar algún detalle del diseño?

-Es muy importante la capa color champán que llevo, da un toque muy especial al vestido. Quiero romper con la tradición y que los espectadores no siempre vean la capa en la misma cadena. Yo también llevo una este año así que espero que me elijan a mí (risas).

-En varias ocasiones ha contado que no le gusta arreglarse mucho, que le gusta ir cómoda, ¿cuánto tiempo aguantará esta noche con el vestido puesto?

-No mucho (risas). Me lo pondré sobre las nueve, para la conexión con las Noticias, me lo quitaré, y poco antes de empezar volveré a ponérmelo. Después de las uvas, felicitamos el año a los espectadores, termina el programa y me lo quito al instante. Me pongo mis playeras, mis vaqueros y me voy con mi marido y con mis padres. Ni fiesta ni nada, yo a disfrutar de mi familia.

-Además hoy es un día ajetreado para usted...

-Pues sí. Primero Zapeando, luego a correr la San Silvestre, después las Campanadas...

-¿Qué tal con su compañero Carlos Sobera, echa de menos a Frank Blanco?

-A Frank siempre lo echo de menos. Con Carlos genial, hay muy buena química y seguro que nos lo vamos a pasar muy bien.

-¿Qué le pide al nuevo año?

-No puedo pedir más, sería egoísta. Mantenerme como estoy y mucha salud.

-¿Y a los reyes magos?

-No suelo celebrar ese día. Soy muy detallista todo el año y no me gusta tener que comprar por comprar ni recibir por recibir. En octubre que es mi cumpleaños siempre me regalan un pijama, así que para qué me van a regalar ahora otro.

-¿Qué le depara el 2016 en lo profesional?

-Seguiré en Zapeando y estoy viendo qué pasa con Pekín Express. Yo creo que sí lo haré, tengo muchas ganas, pero estoy esperando la confirmación definitiva de la cadena.