Los tres ciudadanos alemanes que fueron secuestrados el pasado lunes en una zona montañosa al este de la capital yemení, Saná, fueron liberados este viernes, según fuentes tribales que participaron en las negociaciones. 

El jeque tribal Abdel Qaui Abad, que medió con los captores para su puesta en libertad, aseguró que los tres ciudadanos europeos se encuentran en buen estado de salud en su casa, situada en la localidad de Naba, en la región de Beni Dubian. 

Según Abad, responsable del Gobierno regional, los secuestradores acordaron entregar a los rehenes después de que el Gobierno les prometiera considerar sus demandas. 

El cabecilla de los secuestradores había exigido la puesta en libertad de su hijo y su hermano, condenados hace cuatro meses por el secuestro de cinco ingenieros yemeníes el pasado año, informaron fuentes de seguridad. 

El pasado lunes, una experta de la Cooperación alemana y sus padres, que se encontraban en Yemen de vacaciones, fueron abordados por cinco miembros de una tribu yemení en la ciudad de Radaa, unos 130 kilómetros al suroeste de Saná, la capital. 

El secuestro de extranjeros es un fenómeno común entre las tribus yemeníes, que utilizan este recurso con relativa frecuencia para presionar al Gobierno o para pedir rescates millonarios.