La asociación de vecinos El Pino ha emprendido una campaña de recogida de firmas con el objeto de recabar apoyos para denunciar las múltiples deficiencias que, a su juicio, sufre la barriada y para cuya solución reclaman desde hace tiempo del Ayuntamiento y otras administraciones distintas actuaciones y obras de mejora.

El colectivo vecinal anunció también ayer que en los próximos días se pondrá en contacto con las otras dos asociaciones que existen en la zona -El Cruce y La Casería- con el objeto de solicitar su colaboración y apoyo ante cuestiones que le interesan ya que algunas de las actuaciones que se reivindican -problemas de equipamiento y servicios- afectan también a los vecinos que ambas entidades representan.

La directiva de El Pino fue tajante. El descontento que existe entre los vecinos es más que evidente, según se desprende de una encuesta que han realizado en la barriada durante el verano para valorar el grado de satisfacción de los residentes y las cuestiones que más le interesan y que consideran que deberían solucionarse. Por ello, han emprendido esta campaña de recogida de firmas. Un primer paso para reclamar una respuesta en forma de actuaciones de mejora en la barriada. El siguiente serán las protestas, anuncian. Y empezarán -si no hay una solución en un tiempo prudencial- por la colocación de pancartas y carteles en la barriada con el lema Nosotros también somos de La Isla para terminar con una concentración de todos los vecinos del entorno de la estación.

Las obras de la nueva estación y la reurbanización de su entorno y los múltiples problemas y perjuicios que esta monumental actuación -que se desarrolla en la zona desde hace tres años- ocasiona a los vecinos constituye una de las principales reivindicaciones del colectivo. "Las obras ni deparan ni depararán ningún beneficio a los vecinos. Se suponía que acabarían en octubre y por el camino que van parece que antes de que finalice este año no estarán terminadas", sostiene la directiva de la asociación.

Otra de las demandas de la barriada pasa por la eliminación de las barreras arquitectónicas de toda la zona y por la necesaria mejora de su equipamiento. No hay ni bibliotecas ni centros para mayores ni espacios para jóvenes ni aularios o salas de estudios ni tampoco parques infantiles, se quejan los vecinos.

Reclaman también una mejor regulación del tráfico rodado en la zona a través de semáforos que, al mismo tiempo, hagan más segura la barriada. Y piden que se arreglen los nuevos sumideros colocados que -aseguran- están mal cerrados y desprenden malos olores.

La reposición de arbolado y la adecuación de una pista deportiva -una antigua reivindicación de la barriada- constituyen otros actuaciones que los vecinos de El Pino reclaman desde hace tiempo. También piden un centro de salud que atienda a toda la zona.