Las obras para la construcción del apeadero de La Ardila que funcionará como estación de autobuses de San Fernando -un equipamiento que ha sido durante largo tiempo reclamado por el movimiento vecinal- están ya en su recta final. A los trabajos, promovidos en exclusiva por la Consejería de Fomento como actuación complementaria del proyecto del tranvía, se calcula que le quedan tan solo unas semanas por delante. De hecho, ayer se trabajaba ya en la colocación de los techos del módulo de atención a los usarios, prácticamente acabado.

A mediados de mayo se cree que podría estar terminado en su totalidad este equipamiento que la Junta prefiere llamar intercambiador, precisamente porque tiene por objeto favorecer "la combinación ágil y fluida" entre el tranvía, otros sistemas de transporte público e, incluso, con el vehículo privado y la bicicleta. Prácticamente, coincidirá en el tiempo con el despegue de las pruebas para la puesta en marcha de este nuevo medio de transporte de la Bahía.

También se ha reunido con los taxistas, ya que en este punto se emplazará una parada

Aunque su cesión y su futura explotación y gestión comercial dependen todavía de un convenio que tendrán que suscribir la Consejería y el Ayuntamiento -hace unos días lo recordaba la Agencia de Obra Pública de Andalucía al mencionar la situación del proyecto del tranvía-, desde el equipo de gobierno ya se ha empezado a trabajar y a planificar su futura puesta en marcha y todas las modificaciones de líneas y recorridos que se precisan llevar a cabo.

Esta misma semana, de hecho, se ha mantenido una reunión con responsables del Consorcio Metropolitano de Transportes de la Bahía de Cádiz y con los operadores que trabajan las distintas líneas de autobuses: urbanas, interurbanas, de largo recorrido... Porque la puesta en funcionamiento de la futura estación de autobuses emplazada en el nudo de La Ardila -justo al lado de la parada del tranvía- requerirá necesariamente de importantes cambios. Y la idea, evidentemente, es que las líneas de autobuses que unen San Fernando con distintas localidades de la provincia y de fuera tengan aquí su punto de partida y de llegada, lo que además favorecerá la conexión con otros transportes. En este punto, de hecho, además de tener a dos pasos la posibilidad de acceder al tranvía, se prevé también dar cabida a una nueva parada de taxis, sector que también estuvo representado en esta reunión de trabajo, según explicó el concejal de Movilidad, Antonio Rojas.

Hasta ahora, y aunque no existe estación de autobuses como tal, son las paradas que se aglutinan en el entorno de La Magdalena, en la avenida San Juan Bosco, las que vienen a ejercer esta función. Así que de entrada habría que trasladarlas todas ellas hasta su nueva ubicación en La Ardila, aunque para algunas líneas -matiza el delegado- se opte por mantener también La Magdalena como parada intermedia. Todo habrá que verlo.

De momento no se han puesto sobre la mesa ninguna modificación concreta ni trazados alternativos para las líneas y las paradas. Es, precisamente, en lo que se trabajará ahora con vistas a la próxima reunión que tiene previsto celebrarse a mediados de mayo, prácticamente -si todo marcha según lo previsto- cuando se estén dando los últimos retoques a la obra del nuevo apeadero.

La idea que se baraja desde el Ayuntamiento es que la nueva estación de autobuses pueda ponerse en funcionamiento a la mayor brevedad posible una vez que acaben definitivamente los trabajos, lo que podría ser en torno a junio o julio. Claro que antes habrá que firmar el convenio con la Junta y cerrrar con el Consorcio y con los operadores de las distintas líneas los cambios de recorrido.