Son pocos y no se sienten arropados, al menos como la fiesta merece. Ésta es la conclusión común que se establece tras una pequeña encuesta realizada a cinco agrupaciones inscritas en los actos municipales, un cuestionario en el que apenas hubo que tirarles de la lengua para obtener una respuesta. Críticos, como no podía ser menos, se muestran los representantes de estas tres chirigotas y los dos coros, y no sólo con el Ayuntamiento, si no también - a excepción de uno- con las peñas carnavalescas, las cuales, a su parecer, sólo piensan en hacer negocio y no en el bien de la fiesta. Alto y claro han hablado algunos al respecto. Otros incluso arrojan la toalla: "Esto va de mal en peor, todavía no nos hemos convencido de que la apuesta aquí es la Feria y la Semana Santa", puntualizaba Nicolás Delgado, representante de la chirigota 'Academia flamenca las niñas del feo'.

Sobre todo, el problema lo sitúan en la calle, en la ausencia de iniciativas, en la falta de interés. Del Consistorio, por un lado, que no apuesta económicamente por la fiesta, ni siquiera con las peñas. Es la opinión al menos de la única agrupación, Papelandia, encuestada con vinculación a una de estas entidades, la de Colorín Colorao. "Nuestra intención cada año es celebrar la degustación de papas aliñás en la calle, pero es que el presupuesto no nos da ni para eso", protestaba Juan Vargas. Éste también se quejaba de las subvenciones recibidas en cuanto a que considera que debe darse el dinero en función de la inversión en la fiesta, y no a partes iguales, "como si todos hiciéramos lo mismo", explicaba.

Una falta de dinero que, evidentemente también acusan las agrupaciones, que reclaman una subida de la minuta que se les ofrece. "Está claro que no estamos en esta fiesta para ganar dinero, pero si unos lo hacen vendiendo filetes, nosotros también tenemos derecho a lucrarnos. No podemos actuar por 50 euros y no nos pueden criticar por ello", aseguraba José Luis Magallanes, representante de la chirigota 'El cuatro por ciento de los 300', quien coincidía en este sentido en su homólogo de otra chirigota, 'Aligera que se va el vapor', Pablo de la Rosa Ortega.

Aunque a pesar de todo, ninguna renuncia a participar en la fiesta en la calle. De la Rosa afirmaba incluso que gran parte de sus actuaciones y compromisos se quedaban en La Isla, a pesar del éxito de su agrupación en el concurso del Teatro Falla, donde, aun con la falta de tiempo, el binomio con el autor gaditano Luis María, ha dejado un buen sabor de boca. En los respectivos carruseles participarán también los coros, aunque también se repartirán por el resto de las localidades de la Bahía.

Así lo explicaba el representante del coro 'Menos humos', de Antonio Montiel, quien tiene ya en su agenda carnavalera citas con Cádiz o Chiclana, además de San Fernando. Duras palabras también de quien fuera autor durante muchos años, que asegura que la situación es bastante mala, "y se debe al poco interés de instituciones y peñas". Respaldo, insiste, necesario, para la supervivencia de la fiesta, porque -y de nuevo coinciden todos-, el Carnaval corre peligro. Llamamiento que hacen extensivo también al público, que se congrega en la plaza de las Vacas, y que muchas veces no les escucha. Para las cinco, el Carnaval está enfermo. Y es cuestión de todos encontrar la medicina.