El Pleno aprobaba hace unos días la propuesta del PP para que la playa de Camposoto disponga de servicios mínimos a partir de Semana Santa. No es la primera vez que esta demanda se produce, o al menos se reclama que haya aseos y duchas para los usuarios antes de que empiece la temporada oficial de baño para aprovechar el buen tiempo de los meses previos. A pesar de salir adelante, la iniciativa -vista con perspectivas y todas las condicionantes que deban sumarse- depierta interrogantes, por las posibilidades que tiene de convertirse en realidad, tanto por la cosa administrativa, como por las obras de mejora de los accesos que están pendientes de ejecutarse.

Hace dos semanas aproximadamente que desde Desarrollo Sostenible se remitió, explica el concejal responsable, Fran Romero, la documentación a Contratación para que inicie el expediente para el montaje de los equipamientos de playa. Su tramitación supone unos plazos que hacen complicado que se llegue a tiempo para que esté disponible parte de esa estructura en la semana cofrade. Al menos ante la saturación en la que se mueve el servicio de Contratación, pero más incluso al conocer los detalles de los pasos que hay que dar. Cada acción en la playa referida a infraestructuras, expone el primer teniente de alcaldesa, requiere las autorizaciones pertinentes: Costas, Medio Ambiente, Parque Natural. Para eso sirve el Plan de Usos y Explotación de Playas -que regula tanto los servicios básicos como otros complementarios como los chiringuitos- que se remite a la Junta en enero para que dé su visto bueno y que suele recibir respuesta en torno al mes de marzo. "Los servicios, las actividades que se hagan en la playa y la propia contratación del montaje responde al contenido de este plan", explica el edil andalucista, que deja claro en cualquier caso la voluntad política para intentar que antes de la temporada de baño haya algún servicio servicio disponible para los ciudadanos que acudan a esta parte del litorial isleño.

La duda es si precisamente para esta Semana Santa, que será muy temprana en el calendario, del domingo 25 de marzo al domingo 1 de abril, y por tanto con menos probabilidades de que haga buen tiempo, resulta factible y necesario poner en marcha servicios mínimos.

A todos esos obstáculos se suma otra posibilidad: que en esa fecha se esté actuando en la remodelación de los accesos, como desea el equipo de gobierno para avanzar en la tan ansiada mejora de la entrada a la playa que evite el colapso que cada verano se produce los días de más afluencia (sábados y especialmente domingos), y que en los dos últimos años se ha intentado paliar con medidas de control del tráfico por parte de la Policía Local.

En Camposoto se planea una completa reordenación de todo el área de acceso a la playa, que implica la colocación de una plataforma peatonal sobre el caño que corre paralelo al arenal, la creación de carriles bici, la remodelación de las zonas de aparcamiento y la creación de un tercer carril para mejorar la circulación, con la construcción incluso de rotondas. De los cambios en la calzada y los estacionamientos se encargaría el Ayuntamiento, mientras que la apuesta por mejorar la movilidad de personas y a dos ruedas correspondería a la Junta. La necesidad de contar con maquinaria pesada para ese trabajo ha hecho que el gobierno municipal optara por poner en espera su parte de la intervención. Se aguarda eso sí que las obras que financiará la Junta comiencen cuanto antes. Por eso, la duda sobre la posibilidad de que cuando llegue la Semana Santa, Camposoto esté en plenas obras.