el consejo de hermandades presenta el cartel

Crónica de lo que está por venir

  • Una escena inédita del ambiente que rodea la salida del misterio de Columna -obra de Juan Manuel Salazar- es desde anoche la imagen oficial de la próxima Semana Santa

Para la Cuaresma queda, cierto. Pero la presentación del cartel que se encargará de anunciar la próxima Semana Santa -hablamos en exclusiva del cartel 'oficial', claro- supone cada año en La Isla llegadas estas fechas un auténtico punto de inflexión en el calendario, una especie de sacudida que despierta a esa ciudad cofrade siempre tan dispuesta para enfilar el rumbo hacia un nuevo y glorioso Domingo de Ramos. Eso que algunos llaman ahora la precuaresma y que no deja de ser lo mismo de siempre: ganas de cofradías.

Anoche, el Centro de Congresos, el cofrade Ramón Cao Rondán, que hizo los honores a la fotografía de Juan Manuel Salazar Carrasco, resumió a la perfección -con verbo llano y emotiva sencillez- esa sensación que embarga a los corazones más cofrades desde que se recogió la carroza de Baltasar: "Que ya el cuerpo nos pide ganas de roscos y de torrijas, ya nos pide ganas de estar en el sitio con nuestra papeleta...", admitió con franqueza. No era una exageración. Es simplemente que en La Isla va tocando lo que toca y hay que ir preparándose. Y es, en realidad, el verdadero sentido que encierra este acto cofrade que ayer -en una fría noche de mediados de enero- volvió a llenar al completo el auditorio Lázaro Dou, la sala grande del Centro de Congresos, para que una nueva Semana Santa empezara a hacerse tangible a tan solo ya 83 días de un nuevo Domingo de Ramos.

Ramón Cao puso nombre a la fotografía de Juanma Salazar. Testimonio de fe, la llamó. Podría haberla llamado perfectamente Pura Semana Santa isleña. Porque eso es lo que desprende esta imagen insólita de la salida del misterio de Columna realizada desde una de las torres de la Iglesia Mayor justo cuando la tarde del Domingo de Ramos alcanza su plenitud. El paso en la rampa, la banda tocando, los acólitos, algunos penitentes.... Y la gente. Muchísima gente. Una plaza de la Iglesia completamente abarrotada. Aunténtico horror vacui, según Cao. Solo la Semana Santa sabe hacer estas cosas y regalar estas imágenes que a menudo, sin embargo, escapan del encorsetado cliché que marca el buen gusto -es teoría, por supuesto- de los carteles. Es, desde luego, un cartel poco habitual, uno de los que se la juega con la opinión del respetable. Y una fotografía casi periodística por su valor informativo. Prácticamente viene a ser una crónica de Domingo de Ramos.

Por ello, precisamente, la había escogido su autor entre otras muchas obras, realizadas quizá con mejores criterios técnicos. "En ella se ve reflejado el pueblo isleño y su Semana Santa desde una perspectiva inédita a lo publicado hasta la fecha y que representa un momento peculiar de la Semana Mayor", dijo anoche el presentador al reproducir literariamente las explicaciones que le había dado el fotógrafo.

Aunque este rito iniciador de una nueva Semana Santa que enciende cada año la presentación del cartel no se queda solo ahí. La convocatoria -como toda gran representación- se articula en varios actos y escenas. Y a la imagen de la próxima Semana Santa le acompaña también la puesta de largo de su pregonero, en esta ocasión, Manuel Jesús Sánchez Casas, que tomó también la palabra anoche en el Centro de Congresos tras cederle el testigo Eduardo Albarrán, el pregonero del año pasado, y tras recibir las elaboradas pastas en las que descansarán sus folios en la mañana del Domingo de Pasión.

Sánchez Casas habló de su pregón a medias, de que había dicho que sí al pregón porque a las hermandades -y a la Iglesia- "se viene a decir que sí". Y reconoció que en estos días andaba "en busca de las palabras precisas, de los recuerdos, de esos momentos sublimes...". Es, ahora, la misión del pregonero, que anoche adelantó también el nombre de su presentador -Manuel Muñoz Rivero- y de la marcha que se interpretará en su honor en el Teatro de las Cortes: Corpus Christi, todo un clásico.

Aunque también fue noche de estreno para el nuevo presidente del Consejo, Jesús Cruz, que hace apenas un mes que se ha puesto al frente de la permanente y que encara ahora el gran reto de una nueva Cuaresma y una nueva Semana Santa.

Hubo también un emotivo y casi inexcusable recuerdo para Alfonso Berraquero y para el veterano cofrade del Ecce Homo Eduardo Olmo, recientemente fallecido.

Por su parte, la alcaldesa, Patricia Cavada, presidió el acto y aprovechó para reiterar el apoyo del Ayuntamiento a las cofradías ahora que La Isla encara de nuevo su Semana Santa.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios