"Los resultados destacan el papel del nivel socioeconómico, en particular la educación materna, en el mantenimiento de buena condición física y los niveles de obesidad en el desarrollo de la infancia a otras etapas de la vida. Los esfuerzos de prevención tienen que realizarse desde temprana edad". Así lo recoge el trabajo de investigación coordinado por Francisco B. Ortega, del Departamento de Fisiología de la Universidad de Granada, uq eha sido publicado en Nutrition, Metabolism and Cardiovascular Diseases.

El estudio, realizado en colaboración con el Departamento de Nutrición del Instituto Karolinska, en Suecia, ha querido analizar la óptima capacidad cardiorrespiratoria y los niveles de adiposidad por estar estrechamente relacionados con la salud en la juventud.

Se analizaron los cambios en la aptitud física y la adiposidad en los individuos jóvenes de Estonia y Suecia, y se examina el papel de la educación de la madre en estos cambios. Para los investigadores, el nivel de eduación de las madres influye en una mejor prevención de la salud y por tanto menor riesgo cardiovascular.