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Moda infantil

Niños a la última

  • El espíritu aventurero se apodera de los más pequeños con vaqueros desgastados y chalecos de camuflaje. El negro aparece como novedad en la ropa infantil. Vuelve el estilo hippie con los vestidos ‘patchwork’ y los bolsos con flecos

Un mundo de fantasía y aventura. Las diferentes marcas de moda infantil y juvenil muestran en sus colecciones para este otoño un mundo donde el pasado y el futuro convergen. La influencia de las civilizaciones antiguas se mezcla con las aventuras que suponen los territorios sin explorar. Desaparecen las fronteras entre la realidad y la fantasía. Pero en este reencuentro con el espíritu aventurero también hay hueco para dos estilos más. Por un lado, el futurismo representado en tejidos técnicos, motivos vectoriales y los colores azul y verde eléctrico. Y por otro, la moda inspirada en carreras de coches caracterizada por los colores negro, marfil y rojo, tejidos metalizados y prendas de cuero.

El negro se instaura como novedad entre los más pequeños, un color que contrasta con el rojo, rosa y naranja. Sin embargo, marcas como Zara, Adolfo Domínguez o Mayoral no resaltan ningún color para esta temporada. Marrón, azul, verde, rosa, amarillo, turquesa. Una variada gama de colores para potenciar esa frescura que desprenden los más jóvenes.

Las chaquetas de mangas francesas y los pantalones estilo capri tendrán un gran protagonismo este otoño, al igual que los vestidos saco y las faldas con tul y volantes. Esta última prenda será especialmente corta y se combinará con leotardos de colores. De este modo, las niñas lucirán un look urbano, similar al de sus madres.

Hay que buscar más allá del fondo del armario, incluso escarbar en el baúl de los recuerdos porque los vestidos patchwork, los chalecos de pelo, los abrigos de ante y los bolsos de cuero con flecos vuelven para rememorar el movimiento hippie. También regresan los cuadros de todos los tamaños y estilos. La falda tableada, los pantalones de pitillo y las camisas de largos contrapuestos no podrán faltar en los armarios de las niñas.

La ropa debe ser de lo más cómoda, especialmente para el colegio. De ahí que los principales tejidos sean de máxima calidad. Destaca la franela, lana y tweed. El algodón y el punto aparecen en forma de gabardinas, cardigans, bufandas, gorros y leotardos. Los vaqueros desgastados, las tachas, los efectos de camuflaje y la pana lavada serán otras de las novedades para la próxima temporada otoño-invierno.

Los vaqueros de las chicas serán diferentes. Mientras que en los chicos destaca el efecto desgastado acompañado de sudaderas con capuchas, los de las chicas serán de tonos más oscuros y enriquecidos con cintas de terciopelo y botones de colores.

Los acolchados sintéticos vuelven un invierno más tanto en forma de chalecos sin mangas como en chaquetones.

Los encajes y los estampados estarán de moda, al igual que en las colecciones de adulto. Pero si hay algo que destacará por encima de todo lo demás serán las rayas horizontales en jerseys, faldas, leotardos,  chaquetones y demás prendas.

No hay que olvidarse del frío que pasan las orejas. Este año, los gorros serán una prenda imprescindible en el armario de los niños. Por un lado están los gorros de lana y de punto con o sin borlón. Y, por otro lado, los gorros ladeados hacia un lado de fieltro.

Los más pequeños de la casa no se quedan atrás, quieren estar a la última. Ellos también marcan tendencias.

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