En un marco como el Oratorio de San Felipe, el presidente del Comité Permanente sobre Refugiados del Consejo Nacional Palestino, Salah Mohamed Salah, hizo sonar su mensaje aún más alto.

Ante un auditorio bien conocedor de este problema, Salah recordó que, desde el año 1948, cuando se constituye el Estado de Israel, comienza un problema, el de los refugiados de Palestina, "que es el más complejo de la historia moderna".

Y lo es, en su opinión, por varios motivos. En primer lugar, aseguró que "fueron obligados por el movimiento sionista a salir de su territorio con el objetivo de realizar una limpieza étnica". Además, "los obligados a emigrar a Palestina procedentes de otros países tienen una carta para regresar a su país de origen si lo desean; los palestinos no porque no se lo permitirían". En tercer lugar, Salah dijo que "el problema dura 60 años, pero ha estado oculto".

Pero lo peor de la situación, como afirmó, es que "los refugiados palestinos no tienen derechos". Como ejemplo, puso a todos aquellos asentados en El Líbano: "No tienen derecho al trabajo; no tienen derecho a poner un negocio propio; no tienen derecho a tener una propiedad ni a pertenecer a una asociación; no tienen derecho a beneficiarse de los servicios gubernamentales como la Sanidad".

En los últimos 60 años hay 7 millones de refugiados palestinos en 30 países distintos.