Llegaron tarde, pero llegaron. Si bien es cierto que la afluencia de motoristas se esperaba en El Puerto para la noche del miércoles, víspera de festivo, no fue hasta bien avanzado el jueves 1 de mayo cuando los primeros vehículos de dos ruedas comenzaron a hacerse notar en la ciudad. De hecho, algunos establecimientos hosteleros que habían contado con personal de refuerzo para el mediodía del jueves, optaron por retrasarlo hasta el turno de noche, que fue cuando realmente hizo falta tirar de mano de obra extra.

Ayer a las doce del mediodía se ponía en marcha el dispositivo especial de tráfico que se mantendrá operativo hasta mañana domingo, y que básicamente canaliza el acceso de motocicletas al centro de la ciudad a través de la rotonda de Pozos Dulces y la Ribera del Marisco, aunque solo hasta las doce de la noche.

El alcalde de la ciudad, Alfonso Candón, acompañado por los ediles de Policía Local, Carlos Coronado, y de Comercio, Gonzalo Ganaza, visitaba ayer este dispositivo especial en el que lleva semanas trabajando la Policía Local. Alfonso Candón se mostró muy satisfecho con la afluencia de visitantes durante estos días y señalaba que según le habían trasladado algunos hosteleros "la ciudad está como hace quince años. Vamos a seguir trabajando para que El Puerto siga siendo un referente, es hora de dejar a un lado los discursos negativos y centrarnos en lo positivo, porque hay que llevar a la ciudad al lugar que se merece para que siga siendo un referente en la Bahía de Cádiz".

En esta edición, aunque es inevitable que haya moteros que abusen de la potencia de sus máquinas y quieran hacerla extensiva al resto del mundo, lo cierto es que la mayoría de los moteros visitantes han sabido coexistir con los residentes y con otros visitantes ajenos al evento motero que han querido aprovechar el puente festivo. En general, al menos al cierre de esta edición el ambiente era festivo y el perfil medio de los motoristas era el de grupos de amigos y parejas que disfrutaban del buen tiempo en las terrazas de la ciudad e incluso en las playas. Se podría decir que la motorada ha sentado la cabeza, si echamos la vista atrás y recordamos los años de El Puerto como ciudad de 'caballitos' y noches de insomnio. En este sentido, el concejal Carlos Coronado señalaba que "desde la Policía Local ponemos las herramientas para una sana convivencia entre el motero y el ciudadano. Ahora la pelota está en el tejado de los moteros, a los que pedimos que respeten las normas para que la ciudad que les da la bienvenida lo siga haciendo", decía.

Por lo demás, los sectores más beneficiados por esta importante afluencia de visitantes son el hostelero y el comercio. Este año se han instalado un total de 74 puestos ambulantes en el parque Calderón, una cifra muy superior a la de ediciones anteriores.