El Ayuntamiento de Villaluenga del Rosario pretende dar respuesta a una antigua demanda de sus vecinos, la construcción de un tanatorio municipal. A falta de este tipo de instalaciones, hasta ahora la costumbre en la población es la de velar a los difuntos en sus propios domicilios.

La intención municipal es iniciar las obras durante el mes de enero, que además se unirán a la ampliación del cementerio de la localidad serrana. Con un presupuesto de 110.000 euros, financiados por la Consejería de Gobernación, se levantará un edificio de una sola planta en una parcela de cien metros cuadrados anexa al campo santo.

El proyecto contempla la creación de una sala de duelo, una cámara para los fallecidos, "así como los recursos necesarios para que los familiares puedan velar a sus difuntos con la mayor comodidad y con todos los requisitos higiénico-sanitarios", explicó el alcalde de Villaluenga, Alfonso Moscoso.

Junto a estas obras el Ayuntamiento de Villaluenga también prevé la ampliación del cementerio del municipio, a través de una subvención de 120.000 euros de la Junta de Andalucía.

Según Moscoso, se pretende así aumentar el número de nichos, pero también conservar el patrimonio histórico-artístico de la localidad, dado que el cementerio de Villaluenga se encuentra situado entre los muros de la antigua iglesia del Salvador, edificio de gran valor arquitectónico construido en 1722 y quemado por las tropas napoleónicas.