En la Escuela Infantil Elvira Lindo llueve sobre mojado. Las intensas lluvias de estos días no están haciendo más que agravar los problemas que el centro educativo viene arrastrando desde hace meses. Uno de los principales se sitúa en el Salón de Usos Múltiples (SUM), donde también se ubica el aula matinal. Su cubierta tiene problemas de filtraciones y cada vez que llueve acaba anegándose. "Esto es la historia de nunca acabar. De nuevo nos encontramos con el suelo lleno de agua, el material estropeado y el peligro que suponen las filtraciones de agua en una zona donde hay enchufes con corriente eléctrica", explicaba ayer a este periódico José Enrique Izco, director de la escuela infantil, que sigue a la espera de que se realicen las intervenciones anunciadas por el Ayuntamiento.

Además de esto, todo el alumnado de la escuela está entrando al centro por una puerta trasera desde el pasado 20 de febrero, ya que en la entrada principal se detectó un problema con los roedores que habían hecho nidos en la zona. Por ello, "por motivos de seguridad" -según indica un cartel a la entrada del colegio- se optó por no utilizar la principal puerta de acceso.

El Ayuntamiento ya ha empezado la desratización de la zona y la propia Ampa del colegio ha sufragado el gasto de las anillas que se colocarán en los árboles para evitar que las ratas trepen por ellos y acaben en el interior del colegio.

Todo esto se suma al incidente acaecido este viernes, cuando uno de los árboles de gran porte que existen en el patio de la escuela se resquebrajó y parte de él se acabó desprendiendo. "Nos temíamos que algo de esto podía pasar y no hemos permitido durante estos días que los alumnos saliesen al patio del recreo, por lo que no ha habido que lamentar ningún daño", comenta aliviada la dirección de la Escuela Infantil Elvira Lindo.