Miembros de la Guardia Civil de Cádiz pertenecientes al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) han intervenido 7.000 kilos de madera de pino que transportaban dos camiones y que se hallaban en un almacén ubicado en el polígono industrial El Trocadero, en Puerto Real. La madera carecía de garantías sanitarias de procedencia y podría estar contaminada por un nematodo que asuela los bosques portugueses.

Esas garantías sanitarias consisten en unas marcas de tratamiento de la madera que indican que ha sido tratada mediante un procedimiento térmico o mediante fumigación. También incluyen un pasaporte fitosanitario de los envíos procedentes de zonas contaminadas.

La Guardia Civil informó ayer de que los agentes decomisaron dos partidas durante sendos controles de transporte por carretera. La tercera, durante la inspección del almacén ubicado en Puerto Real. Esa partida fue intervenida en el lugar de destino: tres empresas con sede en la Bahía de Cádiz. La madera fue puestas a disposición del Servicio de Sanidad Vegetal de la Junta de Andalucía.

Las intervenciones se enmarcan dentro de una campaña establecida por la Comunidad Autónoma de Andalucía, para evitar la propagación del nematodo Bursaphelenchus Xilophilus, que asuela los bosques portugueses.

El nematodo Bursaphelenchus Xilophilus es un organismo patógeno de gran virulencia, calificado como de cuarentena en el territorio de la Comunidad Europea. Es originario de Norteamérica y desde allí fue transportado al Sudeste Asiático, donde ha causado graves daños, según informó ayer la Guardia Civil de Cádiz. Las especies susceptibles al nematodo pertenecen al género pinus y a otras coníferas. En los árboles afectados el síntoma se denomina decaimiento súbito y provoca la muerte del árbol en un período de uno a tres meses debido al bloqueo de los canales de savia.