Decenas de conductores se vieron sorprendidos ayer cuando salían del trabajo para almorzar por una nueva protesta de los transportistas, ante el cierre de la escombrera municipal. Desde el sector de la construcción no se ve con buenos ojos la propuesta del Ayuntamiento de trasladar los residuos a otras escombreras mancomunadas, por lo que volvieron a reclamar otras alternativas.

La hora de celebración de la protesta, justo unos minutos antes de las dos del mediodía, y la treintena de camiones y maquinaria que se sumaron al tráfico, hacían prever el colapso de la circulación en el acceso a la localidad desde la carretera de Cortes.

Así ocurrió durante unos minutos, si bien los conductores ubriqueños ya están acostumbrados a atascos similares en la zona conocida como el Stop, sobre todo en horas punta a la salida del trabajo de los marroquineros. Como ya ocurriera la pasada semana, decenas de vehículos circularon entre la Plaza de la Estrella y la glorieta del polígono haciendo oír sus bocinas. Si no encuentran una solución anuncian que repetirán este tipo de protestas.

El delegado municipal de Urbanismo aseguró ayer que "el incremento rondaría sólo los 2 o 3 euros por metro cúbico".