Licencia para vivir al raso en un pinar rodeado de basuras. Ángel Blanco, el indigente con síndrome de Diógenes que desde hace ya ocho años va de pinar en pinar y vive a la intemperie rodeado de desperdicios, podrá seguir en las mismas condiciones después de que un juez haya denegado el internamiento involuntario en un centro social de este hombre, que había sido solicitado por tercera vez por el Ayuntamiento.

La concejala de Bienestar Social, Mariola Tocino, no podía ayer ocultar su malestar ante esta decisión judicial, y según dijo "ahora sólo queda esperar que ocurra lo inevitable, ya que Ángel tiene el beneplácito de los Tribunales para continuar viviendo en unas condiciones lamentables de higiene y cuidado personal. Los jueces han reconocido su derecho a elegir vivir en la basura". Este hombre, natural de Nepas (Soria), padece una esquizofrenia residual y desde el año 2001 recibe visitas periódicas de trabajadores de Bienestar Social en sus lugares habituales de residencia, que hasta ahora han sido sobre todo pinares de distintas zonas de la ciudad. Los trabajadores sociales conocen de sobra el caso de Ángel, que se alimenta de lo que saca de los contenedores de basura y de lo que obtiene practicando la mendicidad.

Con esta negativa judicial al internamiento son ya tres las veces que los jueces han rechazado su ingreso en un centro psiquiátrico. La última solicitud se pidió el pasado mes de noviembre tras comprobar los trabajadores sociales un empeoramiento en la situación personal de este hombre, considerando que estaba en riesgo su integridad física y psíquica y también la salud pública, al acumular basura constantemente a su alrededor. Desde el Ayuntamiento también se han dirigido en estos últimos años a la Fundación Gaditana de Tutela, que atiende a personas con discapacidad que no pueden valerse por sí mismas, aunque sin que se haya recibido una respuesta hasta la fecha, a pesar de las llamadas realizadas por el Ayuntamiento para interesarse por esta solicitud.

Mariola Tocino lamenta que las gestiones realizadas por Bienestar Social hayan resultado una vez más infructuosas, "al habernos topado con la denegación del internamiento involuntario", concluye la edil.

La negra crónica de la vida de Manuel Delgado Villegas, considerado el mayor asesino en serie de la historia de España, cobra actualidad con la película Arropiero, el vagabundo de la muerte, que se proyecta mañana domingo dentro del ciclo de cine de San Luis. La siniestra historia de este asesino en serie estuvo unida en sus últimos años a la ciudad de El Puerto, donde fue detenido el 18 de enero de 1971 como presunto autor del estrangulamiento de su novia Antonia Rodríguez Relinque, de 38 años. Fue sólo uno de los muchos crímenes reconocidos ante la policía por El Arropiero, un ex legionario nacido en Sevilla el 25 de enero de 1943, que había trabajado en la construcción y como mozo de cuadras antes de llegar a El Puerto, donde vendía arropías por las calles y plazas de la localidad. La proyección del filme comenzará a las 20.30 horas. Se trata de una película de 2008, dirigida por Carles Balagué.