La Agencia Tributaria se ha incautado de 1.300 kilos de hachís arrojados al mar por cuatro lanchas en una persecución durante la cual los agentes tuvieron que efectuar varios disparos de advertencia, ya que una de ellas hizo maniobras para embestir a la patrullera.

En un comunicado, la Agencia Tributaria explicó ayer que la operación se inició cuando medios de vigilancia aérea de este organismo divisaron a cuatro embarcaciones semirrígidas en aguas internacionales al sureste de Punta Europa y que se dirigían a las costas españolas. Tres iban cargadas de bultos como los utilizados usualmente en el tráfico de hachís y la cuarta las acompañaba.

Inmediatamente la Agencia Tributaria estableció un dispositivo para interceptar el alijo y envió a la zona a una de las nuevas patrulleras que se han establecido en Algeciras junto con un helicóptero. Al ser alcanzadas por los medios de Vigilancia Aduanera, las tres lanchas que iban cargadas de bultos cambiaron su rumbo, hacia el sur, y arrojaron al mar la carga, 42 fardos de hachís que después fueron recogidos por los agentes flotando en el mar.

En un momento de la persecución, una de las lanchas de los presuntos narcotraficantes se dirigió "en claro rumbo de colisión hacia la patrullera", lo que obligó a los agentes a efectuar disparos de advertencia al agua por delante de la proa de la lancha para defenderse.