Ayer, el consorcio aeronáutico Airbus anunciaba que había culminado la revisión del programa A380 para 2008. En un comunicado, la compañía explicó ayer que está informando a sus clientes sobre los cambios en el calendario de entregas y que, en general, el programa de recuperación, iniciado en el verano de 2006, "progresa bien".

Sin embargo, Airbus explicó que la revisión también ha mostrado "que la fuerte progresión planificada en 2006 no puede conseguirse totalmente". El tiempo y los recursos necesarios para los aviones "son mayores de lo previsto y esto ha creado algún retraso en la transición hacia nuevos procesos de diseño y fabricación". Como resultado, Airbus planea ahora entregar 12 (en lugar de 13) aviones en 2008 y 21 (en vez de 25) en 2009. Los detalles respecto a los nuevos planes y la posterior progresión de entrega en 2010 y los años siguientes, serán discutidos con los clientes durante las próximas semanas.

En su comparecencia de ayer, el delegado provincial de Empleo, Juan Bouza, se refirió a este respecto, preguntado por las consecuencias que podría tener en la factoría de Airbus en Puerto Real. Así, no dudó al afirmar que estas instalaciones no tienen culpa de los retrasos anunciados. Bouza aseguró que en la planta gaditana están "los mejores trabajadores", ya que el trabajo que se realiza en dicha factoría "no sólo está al día, sino que la plantilla está dispuesta a asumir más trabajo".

Lo que ocurre, explicó, es que, "debido a su complejidad", el A380 se fabrica en diferentes centros productivos en los que "sí están teniendo algunos problemas" que desembocan en los retrasos mencionados. El responsable de Empleo afirmó que "tenemos los mejores trabajadores" e insistió en que tiene "datos fehacientes" facilitados por la dirección de la planta de que en Puerto Real "se está cumpliendo exhaustivamente con los calendarios que se le exigen" y animó a otros centros productivos, como Toulouse o Hamburgo a "que se espabilen".

Por otra parte, Bouza también tuvo tiempo ayer para tratar sobre la situación de la factoría de Visteon Cádiz Electrónica. Al respecto, aseguró que no cree que la crisis de la industria matriz de EEUU afecte al empleo de esta planta. Hay que recordar que la empresa matriz arrojó pérdidas de unos 255 millones de euros en el pasado ejercicio.

Además, mostró su confianza en que los trabajadores y la dirección de esta factoría puedan tener resuelto y firmado su convenio colectivo "de aquí a verano". Y es que el delegado provincial de Empleo mantuvo ayer una reunión con representantes de los trabajadores, en la que insistió en la necesidad de que se fortalezca el "diálogo" con la empresa para que, de aquí a verano, puedan "tener firmado el documento con el que ambas partes puedan trabajar con tranquilidad".

Bouza abogó por el establecimiento de un foro de reuniones entre ambas partes para que se produzca un "intercambio constante y periódico" de información sobre el futuro de la fábrica, ya que eso "beneficiaría" el trabajo y "cualquier conflictividad, que no desean ni los trabajadores ni la empresa, carecería de sentido".