El alcalde de Conil, Juan Manuel Bermúdez, y la concejala de Playas, Pepa Amado, se ha reunido con el responsable de la Demarcación de Costas en la provincia, Patricio Poullet, para analizar y valorar el estado del litoral conileño en aras de seguir mejorando la calidad de sus playas.

La seguridad de las playas en relación al estado de algunos acantilados fue el principal problema tratado en la reunión según han apuntado desde el Ayuntamiento. Debido a la orografía del litoral de Conil son varias las playas que poseen acantilados que, debido a la acción del paso del tiempo y a la erosión del aire y el mar, presentan cierto riesgo de desprendimiento. Así, Costas presentó un informe sobre el análisis del problema con soluciones que pasan por colocar escolleras de piedra o rebajar el peralte de inclinación de los acantilados.

Desde el Ayuntamiento se está estudiando la viabilidad de dichas medidas en las que influyen factores como la imposibilidad de llevar a cabo las obras con inmediatez, su alto coste económico o el posible impacto visual sobre los accidentes geográficos de esta costa.

Otro de los temas tratados fue el de la regeneración y conservación de las playas debido a la falta de arena que existe en ciertos puntos o el acondicionamiento de la bocana del río Salado. Asimismo, se puso de manifiesto la necesidad de aumentar la protección de algunas zonas como las dunas de la playa del Chorrillo en las que se colocará una pasarela o la parte superior de los acantilados para que los ciclistas y transeúntes puedan circular con total seguridad.