El alcalde de Arcos, Isidoro Gambín, se desplazó ayer hasta Madrid para negociar la deuda que el Ayuntamiento mantiene con la Seguridad Social. En este sentido, la institución municipal arrastra una deuda de 30 millones de euros con Hacienda y Seguridad Social. De este montante, 22 millones los afrontará el Ayuntamiento a través de un préstamo ICO, que ya está aprobado, y Gambín espera llegar a un acuerdo con la Seguridad Social para poder tener facilidades de pago para los 8 millones de euros restantes.

Gambín calificó ayer esta reunión con la Dirección General de la Seguridad Social como "trascendental y muy positiva", donde el gobierno local del PSOE explicó "todo lo que hemos hecho para mejorar la economía del Ayuntamiento, la reducción de gastos que hemos aplicado. Todo encaminado a poder llegar a un acuerdo para que nos den facilidades de pago", dijo el alcalde al término de la reunión, a la que le acompañó la delegada municipal de Hacienda, María José González. Ahora, el Ayuntamiento se ha comprometido a remitir un informe al ente estatal con las medidas aplicadas, más el pago de la cuota relativa al mes de abril de Seguridad Social y la transferencia de un millón de euros para poder alcanzar un acuerdo que, según Gambín, podría llegar "en dos semanas".

Hay que recordar que Arcos tiene desde hace tres años bloqueados los fondos estatales (PIE), que suponían la entrada al mes de un montante de 600.000 euros. Además y por culpa de las deudas que el pueblo arrastra con Hacienda y Seguridad Social, el Ayuntamiento no puede acceder a determinadas subvenciones públicas como le ha ocurrido en el caso de las ayudas Edusi, que ha solicitado a través de la Diputación. "Cuando se recupere la PIE, ese dinero irá destinado al pago corriente de Hacienda y Seguridad Social y al acuerdo de pago que se establezca", explicó el alcalde.