Tribuna libre

Hay ruidos que dan vida

Artículo de Opinión de Antonio Vergara de Campos y Antonio Bascuñana Quirell, responsables de la Cena de Gerasa

Mientras leemos el Diario del Carnaval del día 29 de enero buscando sus ingeniosos comentarios sobre nuestra fiesta y la lista de los que han pasado a las semifinales nos encontramos con una sorpresa: alguien que nos persigue desde hace tiempo y cuya identidad para nosotros era una incógnita se identifica. Se llama Javier Osuna. El motivo de su malestar: su dormitorio da al patio de San Felipe Neri donde Gerasa ha organizado en los últimos 13 años diez cenas.

Querido Javier, por supuesto y antes que nada nuestras disculpas para tí y tus convecinos por las molestias. Pero nos gustaría hacerte llegar unas razones, para que las compartas con nosotros y pedirte tu colaboración para que tus quejas se encaminen hacia quien creemos deben ir dirigidas.

Gerasa es la organizadora y responsable de la cena. Tanto los colaboradores, que aportan su trabajo y sus viandas, como los asistentes, que pagan sus entradas, como el propio colegio, que nos cede generosamente sus instalaciones, deben quedar al margen de cualquier polémica. Es posible que tu visión desde tu ventana haya deformado la percepción de la realidad pues la cena pretende ser sencilla y deliberadamente desprovista de cualquier "tontería". Los que a ella acuden son ciudadanos, mayoritariamente de modesta economía, que de buena fe aportan su grano en el mantenimiento del Hogar. En ningún momento hemos visto a quienes denominas glamorosos de la ciudad. Los representantes ciudadanos que han acudido (de todos los colores políticos) han evitado el protocolo y nos han acompañado como unos amigos más. Recuerda que la cena se denomina de Los amigos de Gerasa, eso es lo que ha pretendido ser en todo momento, una reunión de amigos.

No sabes lo esencial que para los acogidos en el Hogar Gerasa han sido estos actos durante todos estos años. Nos han servido de apoyo en todos los momento iniciales, han sido una indispensable contribución al sustento del Hogar y estamos convencidos de que no podríamos haber llegado hasta aquí sin ellos. Los gaditanos en todo momento han estado detrás de nosotros. En tu carta olvidas mencionar a los más importantes, a la razón de la cena: los acogidos en el Hogar. Son paisanos nuestros que han tenido una vida desafortunada. Sin esta cena es seguro que todos estarían en peores condiciones y que muchos estuvieran muertos, créenos.

En estos años hemos solicitado los permisos correspondientes y cumplido con lo que en cada momento las autoridades nos han autorizado. A pesar de todo nos han enviado (¿has sido tú?), a la Policía Municipal casi todos los años. Ya este último año el permiso se concedió hasta las 2 de la madrugada. A esa hora cesó la música. Posteriormente sólo nos quedamos algunos, básicamente para ayudar a recoger. Nadie alzó la voz ni estaba afectado por el alcohol como parece dejas caer en tu escrito.

Te hemos causado molestias diez veces en 13 años. Piensa en la innumerable cantidad de actos nocturnos (organizados o espontáneos) con más volumen sonoro de muy diverso género que han ocurrido en estos años en Cádiz. Sin ir más lejos, piensa en nuestro carnaval. Te puedes considerar un privilegiado respecto a los que vivimos en otras zonas de la ciudad.

Los acogidos en Gerasa son un ejemplo palpable de la marginación en nuestro tiempo. Ya cuando fuimos a construir el Hogar se nos pidió por parte de unos vecinos que se decían solidarios con nosotros que lo hiciéramos fuera de la ciudad, lejos de donde ellos vivían. ¡Claro! está bien solidarizarte con el de Bostwana pero la verdadera prueba está cuando el marginado está junto a nosotros. Te agradecemos tu cesión de derechos de autor. Ten la certeza que lo que nos llegue será exquisitamente empleado pero tienes ante ti una prueba más, la de nuestra cena. No pretendas expulsarnos. Es de sentir que hayamos perturbado el sueño de algunos ciudadanos, pero hay que estar bien despiertos para tomar conciencia de que no somos una minoria "benéfica" los protagonistas de la cena, sino un gran problema social del que nos hacemos voz y acto. No se puede trasladar, como sugieres, a un chalet particular de El Puerto un síntoma social.

En una sociedad que se dice moderna, la atención a los más necesitamos debe recaer en el esfuerzo colectivo de todos. Esto se llama financiación a través de Presupuestos Públicos (que a su vez proceden de los impuestos que todos pagamos). Es posible que el Hogar Gerasa, que era en su momento una novedad en Andalucía, fuera en sus inicios sustentada parcialmente por particulares a través de actos como este. Estarás con nosotros que a estas alturas es más que razonable que la situación hubiera cambiado una vez demostrada la utilidad social del Hogar. Es de justicia que la financiación completa del Hogar se realice a través de los presupuestos públicos. Pues bien, tenemos la certeza de que vamos para atrás. Cada vez nos encontramos en una situación más inestable. A fecha de hoy no sé cómo y si acabaremos el año. Hemos sido incapaces de hacer ver a las autoridades (de la Consejería de Asuntos Sociales) la necesidad de estabilidad económica del Hogar para que podamos seguir prestando la asistencia actual. Las somnolientas conciencias no deben de olvidar que ojalá tuviéramos una financiación que nos hiciera no depender de la comentada cena.

Ya sabes, la Cena Solidaria de amigos de Gerasa nos sigue siendo necesaria. Te invitamos a que nos conozcas, te pedimos encamines tus quejas e influencias hacia esa Administración que nos mantiene en la marginalidad y te invitamos a que mientras no consigamos resolver nuestra financiación, tu acto solidario sea tolerarnos ese día o, incluso mejor, acompañarnos. Nos sentiríamos gratificados. Como nos dices que muestras tu apoyo a nuestra labor, ya sabes … la mejor forma de decir es hacer. Un saludo

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